Se les imputan 24 hechos delictivos similares cometidos en las provincias de Albacete, Almería, Burgos, Cáceres, Ciudad Real, Córdoba, Cuenca, Huesca, La Rioja, Málaga, Murcia, Navarra y Zaragoza.
Contaban con gran capacidad para desplazarse por todo el territorio nacional y para actuar a un ritmo frenético, como lo demuestra el hecho de que la noche anterior cometieran otro robo con fuerza en Albacete.
Agentes de la Policía Nacional han desarticulado una organización criminal de aluniceros al detener, in fraganti, a cuatro personas que acababan de violentar, presuntamente, una tienda de telefonía en el interior de un centro comercial de Burgos, en donde se apoderaron de 77 terminales móviles de alta gama y seis tabletas.
Los detenidos viajaban a bordo del mismo vehículo que habían utilizado durante la madrugada anterior para cometer un robo con fuerza similar en la ciudad de Albacete, lo que demuestra la gran capacidad de desplazamiento por todo el territorio nacional de esta organización. Hasta el momento, se le ha podido imputar un total de 24 robos con fuerza mediante alunizaje y 19 sustracciones de vehículos.
Los agentes se percataron de la existencia de un grupo criminal especializado en robos con fuerza en establecimientos de telefonía, ubicados tanto en centros comerciales como en la vía pública, y repartidos por todo el territorio nacional.
Las informaciones recabadas por la Policía Nacional pudieron constatar el ritmo frenético de esta organización, así como los daños ocasionados en cada una de sus ejecuciones.
Sus intervenciones delictivas presentaban un patrón común, que consistía en fracturar los acristalamientos o persianas de los establecimientos mediante el uso directo de vehículos o de mazas y picos. Obtenían, de esta manera, cuantiosos beneficios de manera rápida y sencilla.
Para la ejecución de estos hechos ilícitos, utilizaban vehículos robados de gama media, los cuales eran utilizados como ariete. Para la huida, sin embargo, utilizaban turismos de gran cilindrada y de mayor volumen, también sustraídos, los cuales aparecían posteriormente rociados en su totalidad con extintores, consiguiendo de esta manera borrar los vestigios biológicos que pudieran ser hallados en la inspección ocular técnico policial. Estos vehículos portaban matrículas sustraídas que, en ocasiones, iban sobre la placa original del vehículo.
24 hechos similares en 13 provincias de todo el territorio nacional
La organización, altamente especializada en este tipo de delitos, realizaba labores previas de captación de información de los lugares donde iban a cometer el robo, analizaban los vehículos a utilizar y llevaban a cabo la sustracción de los mismos. De manera previa a la intervención que provocó el arresto de los cuatro miembros de la organización en Burgos, ya habían llevado a cabo otro hecho similar en la misma ciudad tan solo 20 días antes. En esa ocasión, en apenas un minuto y medio se apoderaron de 122 teléfonos de gama alta valorados en más de 82.000 euros.
En total, este grupo criminal cometió 24 hechos delictivos similares en las provincias de Albacete, Almería, Burgos, Cáceres, Ciudad Real, Córdoba, Cuenca, Huesca, La Rioja, Málaga, Murcia, Navarra y Zaragoza.
El Juzgado ha decretado el ingreso en prisión de tres de los cuatro detenidos, quedando en libertad el único que carecía de antecedentes. Una investigación que continúa abierta y no se descartan nuevas imputaciones y detenciones.