El acto del Ministerio de Igualdad para conmemorar el Día del Orgullo ha concluido con una actuación en la que los participantes han atacado a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
En boicot se ha producido durante un grotesco popurrí al amparo de esta institución gubernamental donde se ha boicoteado el trabajo de los diferentes cuerpos policiales que desempeñan, precisamente, labores de protección y velan por los derechos y libertades del colectivo LGBTI entre otros, entonando un lamentable: “¡Ya están aquí las bolleras! […] Pin pon fuera, la policía la queremos fuera”.
El espectáculo ha estado presidido por la ministra de Igualdad, Irene Montero, que hizo alusiones a ” las demócratas, los demócratas, les demócratas” consintiendo como sus acólitos sembraban odio sobre aquellas personas que tratan de velar por derechos de todos, es decir, en su jerga singular los que serían: “policias, policios y policies”.
En su particular “episodio arcoiris” la ministra se ha encargado de dar visibilidad a las personas que integran el colectivo LGTBI ejerciendo una politización y manipulación sectarista que deslució una celebración desprestigiando a aquellos que nos protegen en el día a día.
Estos, estas, estes que gritan “pin, pon fuera, queremos a la policía fuera” el día que la necesiten, que llamen a un amigo, amiga o amigue.