La Unión General de Trabajadoras y Trabajadores, quiere recordar que según las recientes estimaciones mundiales sobre la esclavitud moderna -trabajo forzoso y matrimonio forzoso- de la OIT, 21´3 millones de personas en todo el mundo son víctimas del trabajo forzoso.
Esta forma de la esclavitud moderna, según la OIT afecta a todos los sectores de la economía privada, siendo los servicios, la industria manufacturera, la construcción, la agricultura y el trabajo doméstico, los cinco sectores que en mayor medida concentran el trabajo forzoso de adultos.
Según los datos de la Fiscalía General del Estado, en el caso de España, las diligencias de seguimiento abiertas por presuntos delitos de trata laboral se concentran en el sector agrario, el cuidado de personas mayores y trabajo doméstico y la construcción.
El sindicato se refiere al trabajo forzoso porque esta es una de las finalidades de la trata de seres humanos, la trata laboral, que hoy por hoy y como reiteradamente ha recordado a España el Consejo de Europa, sigue siendo una asignatura pendiente en este país, y en este sentido, es imprescindible la puesta en marcha de un sistema de protección a sus víctimas, así como medidas preventivas y más recursos para la detección de víctimas y la persecución de los victimarios.
Una asignatura pendiente en España
UGT señala que el nuevo incremento previsto en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado de la partida dedicada a la atención de mujeres y niñas victimas de trata con fines de explotación sexual que en el año 2023 alcanzará los 7 millones de euros es positivo, pero lamenta que sigamos sin extender los mecanismos de protección a todas la victimas de trata con independencia del sexo y la finalidad de la trata.
Por todo ello, el sindicato espera que la futura ley integral de lucha contra la trata de seres humanos resuelva las carencias y propicie la existencia de un sistema de protección a todas las víctimas.