En un tiempo lleno de malas noticias e incertidumbre sobre el futuro, los pequeños grandes gestos nos hacen ver el mundo con esperanza.
Los hechos ocurrieron el pasado día 29 de marzo, cuando unos agentes de la Policía Nacional de la Línea de la Concepción (Cádiz), se encontraron con un perro abandonado en la calle. No tenía chip y estaba bastante desnutrido.
Los policías, pertenecientes al Grupo Operativo de Respuesta (G.O.R.) realizaron cuantas gestiones pudieron por localizar a su dueño, si bien el resultado fue negativo.
Ante esta situación de abandono y desnutrición del perro, uno de los integrantes del G.O.R. optó por adoptarlo y quedarse con él. Esta iniciativa por parte del policía fue muy bien recibida por el resto de sus compañeros del grupo, que, en un gesto de solidaridad, decidieron hacer una recaudación de dinero para poder hacer frente a los gastos del veterinario.
El perro se encontraba abandonado, sin el chip y bastante desnutrido.
Nos encontramos en unos momentos difíciles, en los que la pandemia del coronavirus está haciendo verdaderos estragos en España y en el resto del mundo, si bien historias como esta nos alegran el día y nos hacen mirar con esperanza el futuro.
El perro al que han decidido llamar Gor en honor a los integrantes del grupo que lo han salvado de una muerte segura en la calle y le han dado una nueva vida, se encuentra bien en casa de su nuevo dueño. Ya está a salvo.