El soldado pertenece al Batallón de Zapadores y se encontraba en la playa con su familia cuando auxilió a la joven
El soldado Soler, perteneciente al Regimiento de Ingenieros nº 8, se encontraba disfrutando de una tarde de playa con su familia en Melilla el pasado 5 de septiembre, cuando una de sus hijas observó cómo una bañista pedía auxilio después de ser sorprendida por una ola y perder el equilibrio, debido a que no hacía pie.
Ante ello, la joven se lo contó a su padre y, alertado por sus palabras, el militar se acercó hasta la orilla y comprobó que una adolescente estaba pidiendo ayuda a unos 100 metros. No lo dudó y se lanzó al mar para intentar ponerla a salvo, aplicando los conocimientos de socorrismo adquiridos en su puesto, en la Sección de Reconocimiento del Batallón de Zapadores I/8. Al llegar hasta ella, la encontró bastante alterada, por lo que intentó tranquilizarla para remolcarla hacia la orilla. Una vez fuera del mar, los servicios médicos la atendieron y certificaron que estaba en perfectas condiciones.
Con esta intervención, la empresa concesionaria del Servicio de Salvamento Acuático del Plan de Salvamento, Socorrismo y Puestos de Primeros Auxilios de las playas de Melilla ha enviado una carta de agradecimiento a la Comandancia General de Melilla para agradecer la actuación del soldado Soler. En dicho documento exponen: “Teniendo en cuenta la peligrosidad que conlleva lanzarse al mar una persona, poniendo en peligro su propia integridad física para ayudar a otra, el cuerpo de salvamento y socorrismo de las playas de Melilla quiere agradecer el apoyo que ha recibido para que esta persona pueda volver a casa sana y salva”.