Actuaba con una furgoneta y en locales de ocio. Se le acusa de cometer al menos dos delitos de agresión sexual. Se acercaba a mujeres en aparente estado de embriaguez para ofrecer llevarlas a casa y las agredía sexualmente.
Todo comienza con una denuncia de una víctima. La Unidad de Atención a la Familia y a la Mujer (UFAM) de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Valencia fue la encargada de la investigación.
Este hombre se había acercado a la víctima, a quien había ofrecido acompañar, y había conseguido que la mujer subiese a bordo de una furgoneta para, una vez en el interior, agredirla sexualmente aprovechando el estado de embriaguez de ella mientras la intimidaba verbalmente. En una ocasión llegó a consumar la violación.
Su forma de actuar era siempre la misma, acercarse a zonas de ocio, buscar a la víctima, ganarse su confianza y asaltarlas en la furgoneta.
Fue un dispositivo de vigilancia el que acabó con su detención al actuar siempre en las mismas zonas de ocio.