- La Audiencia de Alicante condena a cinco años de prisión a un hombre que violó a una menor de edad a la que se ofreció a llevar a casa
- La Sala le considera autor de un delito contra la indemnidad sexual con las atenuantes de reparación del daño y dilaciones indebidas
La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Alicante ha condenado a una pena de cinco años de prisión por un delito de agresión sexual a menor a un hombre que violó a una niña a la que se ofreció a llevar a casa durante las fiestas del pueblo en el que ambos residen, en la comarca de la Marina Alta.
La Sala le considera autor de un delito contra la indemnidad sexual para el que aprecia las atenuantes de dilaciones indebidas y de reparación del daño, ya que el penado consignó en el juzgado la cantidad de 20.000 euros con anterioridad al juicio para hacer frente a la indemnización que recibirá la perjudicada por los daños morales a consecuencia de los hechos.
El hombre no podrá acercarse a menos de 300 metros de la víctima, su domicilio o su lugar de estudios o trabajo, ni comunicarse con ella por ningún medio durante diez años. Durante la celebración del juicio, el condenado reconoció los hechos y se mostró conforme a la pena que para él solicitaban el Ministerio Fiscal y la acusación particular.
La sentencia considera probado que en la madrugada del 4 de agosto de 2018 el condenado, que tenía 21 años, se encontró con la víctima, de 15, en el municipio en el que ambos vivían que celebraba las fiestas locales.
El penado convenció a los amigos de la menor, que se encontraba mal a consecuencia de la ingesta de bebidas alcohólicas, para quedarse con ella y acompañarla a casa caminando. Ni la víctima ni los amigos mostraron oposición y creyeron las palabras del joven, al que conocían del pueblo y sabía dónde vivía la menor.
Una vez se quedaron a solas, la llevó hasta su coche con la excusa de acompañarla a bordo del vehículo. Sin embargo, se desvió del camino de forma intencionada para ir a una zona de descampado aislado y poco iluminado, donde la forzó sexualmente pese a la negativa de la chica, que se opuso verbalmente y por la fuerza, oposición que le provocó lesiones.
La sentencia es firme y no puede recurrirse.
La indemnización no debería ser un atenuante.
Todos los bolsos deberían ser castrados, así más de uno se lo pensaréis antes de cometer semejante atrocidad!!