La virgen de los sicarios: gatillo y rosario
Columna de Ricardo Magaz. “CRÓNICAS DEL NUEVE PARABELLUM”. Encontré a Walter Eduardo por circunstancias del destino una madrugada lluviosa de otoño. Todavía rechinan sus palabras en mis oídos. “Le piqué el billete porque era un mal nasido y porque soy un profesional. La virgensita lo sabe. Escríbalo así”, declaró con el arrojo del deber cumplido…