El paraíso existe y la rubia del jaguar… ya veremos
Ayer, después de meterme entre pecho y espalda dos huevos fritos – en aceite de oliva nada de huevos a la plancha horrorosos- me senté en una humilde terraza de pueblo manchego, de España casi vaciada pero con ambiente. Una televisión más grande que las mesas donde se servían las copas, emitía noticias avisando de…