Dedicado a Miguel Ángel, gracias a su labor se aprende a salvar vidas
Estoy en mi día de fiesta, esperando en la cola del supermercado, analizando qué gestiones voy a hacer después. De repente, una señora de unos 50 años se desploma a solo unos metros de mí. Noto que mi pulso se acelera, mi mente se activa sin pensar “tienes que hacer algo, tienes que ayudarla”. Me…