Miércoles 10 de marzo de 2021, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, disolvía la Asamblea madrileña y convocaba para 55 días después, tal y como marca la legislación electoral madrileña, las décimo segundas elecciones autonómicas de Madrid, es decir, el martes 4 de mayo de 2021.
Como en todas las elecciones, el marco normativo es algo diferente, y situaciones cotidianas de lo más normales, en esas fechas, pueden conllevar consecuencias administrativas o penales, como podrían ser circunstancias como la vestimenta que se use al momento de ir a votar; o el tan conocido artículo 11 de la Constitución Española (Libertad de Expresión), puede acarrearnos complicaciones según lo que se exprese en jornada de reflexión, cuando usar esas mismas palabras un par de días después, no tendrían ningún efecto.
En todos los comicios, suelen darse distintas situaciones que ponen en jaque a los profesionales de la seguridad, y no hablo del Nivel 4 de Alerta Anti-terrorista, nivel que ostentamos desde el año 2015, sino del tipo de intervenciones que se suelen dar directamente relacionadas con el acto electoral, ya sean los continuos boicots a partidos de ideología contraria a la de los infractores, daños para impedir la apertura de los colegios electorales, etc.
Otra particularidad del día de las elecciones es que en esos días, algunos ciudadanos de a pie bajo unas circunstancias concretas, pasan a tener consideración de funcionario público y hasta AUTORIDAD, por lo que debemos ponernos a su entera disposición llegado el momento. Y las documentaciones que reciban, serán consideradas documentos oficiales, con la responsabilidad que ello conlleva, y deberán ser custodiadas por sus garantes con la debida diligencia.
Debido a lo complicado de las intervenciones, es de especial importancia pasar desapercibidos y evitar estar en el centro de los continuos enfrentamientos de los representantes de las distintas candidaturas, como sucedió en los comicios de noviembre de 2019, cuando una pequeña bandera de España bordada en la mochila personal de un agente que prestaba servicio en un colegio electoral, provocó una trifulca entre candidatos, interventores y componentes de la mesa, llegando al extremo de que se dió constancia del hecho a la Junta Electoral correspondiente.
A lo anteriormente expuesto, el día de elecciones, habrán actores y normas de nuevo cuño debido a la crisis del COVID-19 como son el Responsable de Seguridad Sanitaria el cual tendrá unas funciones e instrucciones concretas con respecto a esta problemática, debiendo ser apoyado por los profesionales de la seguridad y existiendo un protocolo incluso para los posibles casos de COVID detectados en el local electoral.
Otro hecho que pudiera darse y que es conveniente conocer como se ha de intervenir, es que el día de las elecciones, coincide con el Día Internacional de Star Wars, hecho que en otras circunstancias no sería más que una anécdota, este día podría complicar las labores de seguridad a la hora de identificar a personas, ya que, como sucedió en los comicios de 2019, muchas personas deciden ejercer su derecho al voto ataviados con la indumentaria de los personajes de la saga de George Lucas.
Con todo lo expuesto anteriormente y la falta de formación específica recibida de manera oficial, las fechas conocidas como “la fiesta de la democracia”, pueden convertirse en un quebradero de cabeza para los profesionales de la seguridad, por lo que solo puedo desearos suerte, salud y buen servicio.