Los sindicatos JUPOL, SUP, UFP, SPP, consideran que la orden de servicio que se confeccionó para dar respuesta al partido de alto riesgo R. C. Deportivo de la Coruña – Málaga C.F. no estuvo a la altura de las circunstancias.
Con la información que se manejaba, ha quedado claro que había constancia en la Jefatura Superior de Policía de Galicia, de que al menos un grupo numeroso de ultras procedentes de Málaga iba a llegar el sábado, teniendo su alojamiento previsto en la localidad de Órdenes. Por este motivo, desde las organizaciones sindicales en unidad de acción no podemos entender como en la orden de servicio que se elaboró para dar respuesta a este partido de alto riesgo, no se reforzó con indicativos especializados en orden público la noche anterior.
Esta falta de previsión puso en riesgo la integridad física de los seis policías nacionales destinados en los radio patrullas que entraron de servicio el sábado en el turno ordinario de noche, los cuales, tuvieron que hacer frente, con apoyo de otras cuatro dotaciones de policía local a los altercados provocados por los ultras del frente “Boquerón”. Después de cercar al frente malagueño en el paseo marítimo, y cuando ya este grupo salía camino de vuelta a Órdenes en 18 furgonetas, fueron emboscados por integrantes de los “Riazor Blues” con lanzamientos de objetos contundentes y botellas, a lo que tuvieron que dar respuesta sin material de protección antidisturbios (cascos y escudos). Gracias a la entrega y profesionalidad de los policías, se resolvió la situación de la mejor manera posible, y finalmente se pudo reconducir el grupo ultra del Málaga a la salida de la ciudad sin heridos ni más enfrentamientos.
Y es que llueve sobre mojado, sindicatos policiales vienen denunciando desde hace tiempo la falta de personal en seguridad ciudadana, sobre todo en los conocidos como Zetas, que son los radio-patrullas que se hacen cargo de las llamadas al 091 y de otras tareas de prevención y represión de la delincuencia. Desde hace diez años se perdieron más del 50% de efectivos de este grupo, motivado por la creación de otras unidades y por la falta de actualización del catálogo de puestos de trabajo.
Por otra parte, después de tener conocimiento de ciertas manifestaciones hechas incluso por responsables políticos locales, en los que se pone en entredicho la imparcialidad de la Policía Nacional, aduciendo a las detenciones practicadas contra “Riazor Blues” y no así contra integrantes del frente ultra malagueño, deseamos aclarar que la policía nacional actúa siempre conforme a derecho, neutralidad política en imparcialidad, y teniendo en cuenta las circunstancias de cada momento.
En este caso, no se detuvo a nadie del frente Boquerón porque no había un motivo suficientes para hacerlo teniendo en cuenta que en el único momento que son interceptados por la policía nacional y local el sábado de noche, era imposible identificar en una masa de personas los autores de los destrozos que habían ocurrido momentos antes en el bar herculino. Tampoco dio lugar a ninguna detención en el seno de este grupo el domingo, ya que dichos ultras fueron encapsulados por la Guardia Civil y Policía Nacional desde la salida del hotel en Órdenes hasta su llegada al estadio y viceversa. No sucedió así con el grupo ultra “Riazor Blues”, el cual, el domingo por la mañana protagonizó disturbios intentando interceptar al grupo ultra “Boquerón”, cuando era escoltado por la U.I.P. de la Policía Nacional, momento en que se enfrentaron a los agentes antidisturbios, con resultado de dos detenidos de dicho grupo.
En definitiva, las organizaciones representativas firmantes de este comunicado, pediremos explicaciones y que se depuren las responsabilidades pertinentes a los artífices de dicho dispositivo, a la vez que felicitamos a todos los policías tanto nacionales como locales que resolvieron las distintas situaciones de manera formidable, incluso con los pocos medios de que disponían en algún momento