Columna de Ricardo Magaz en h50 Digital Policial. “CRÓNICAS DEL NUEVE PARABELLUM”.
Ramón Serrano Suñer fue cuñado de Franco. El dictador le nombró seis veces ministro de sus primeros gobiernos; ocupó carteras como Gobernación o Asuntos Exteriores. Serrano Suñer era germanófilo y admiraba a Hitler y a Mussolini. Durante la Segunda Guerra Mundial mantuvo una estrecha relación con la Alemania nazi y promovió el envío de la División Azul para luchar contra la Unión Soviética de Stalin.
Lo que escondían sus ojos
En el libro de Nieves Herrero “Lo que escondían sus ojos”, y en la serie de televisión del mismo título, Serrano Suñer queda como un galán con mucho poder y un tipo adúltero por naturaleza en aquella España del nacionalcatolicismo. Ironías de la vida.
Conocí en un acto de radio Intercontinental a Serrano Suñer, ya casi centenario; murió en 2003 con 101 años. Desde el sindicato habíamos comprado una hora de frecuencia semanal en Intercontinental, cadena que gestionaba uno de sus hijos, constitucionalista. Allí producimos y emitimos nuestro programa “Policías en las ondas”, luego “Panorama de Seguridad”, que dirigí a la par con mi colega Lucio Toval. Era la estación de radio que ofrecía espacio suelto con cobertura para todo el país. En 2019, el locutor Carlos Peñaloza la adquirió convirtiéndola en la actual Inter radio, con el periodista Albert Castillón como referente vespertino.
Imputado por Garzón
A primer golpe de vista, Serrano Suñer me pareció en aquel momento un anciano inofensivo, incapaz de dañar a su perro. Quizás el cabello blanco y la senectud temblorosa del personaje pudieron más en mi juicio que su pasado.
No pensó igual la Audiencia Nacional. En octubre de 2008 el juez Garzón le imputó crímenes contra la humanidad, cometidos durante la guerra y el primer franquismo junto a una treintena de cargos del régimen. Para entonces Serrano Suñer llevaba cinco años enterrado.
Fascinante historia para un guion, de no haber miles de muertos bajo tierra. Y es que un hombre no es otra cosa que lo que hace de sí mismo… y del juicio de las enciclopedias.
(*) Ricardo Magaz es profesor de Fenomenología Criminal en la UNED, ensayista y miembro de la Policía Nacional (sgda/ac)