A locuras no gana nada al ser humano y a ocurrencias tampoco. Hay quien trata de darle rienda suelta a la creatividad y no cae en que el plan hace aguas, como ha sido el caso de una mujer que llevó al cadáver de su tío a una sucursal para recibir un préstamo. Brasil ha sido testigo de una jugada de miedo.
Las redes sociales han amanecido en España con un vídeo que ha dejado perpleja a la población. No han tardado los comentarios cachondeándose del vulgar y lamentable intento de hacerse con un buen dinerillo, nada menos que 17.000 reales -3.000 euros-. Y es que una mujer, con aparente buen rollo y tranquilidad, ha llevado a su tío, fallecido, a una sucursal en Río de Janeiro.
En el vídeo se puede apreciar que el estado del varón era el de un cadáver, no había lugar a dudas. Ninguna de las articulaciones se mantenía. Lo que resulta verdaderamente curioso es cómo la mujer lo trataba de disimular colocando al finado erguido. Evidentemente, los empleados se percataron y llamaron a la policía, que no tardó en llegar. El pobre fallecido tenía 68 años y no le dejó descansar en paz.
Así, la sucursal de Itaú vivió, probablemente, el intento de estafa más rocambolesco de su historia.