Saúl Craviotto medallista olímpico deja los entrenamientos y vuelve a su puesto de trabajo en la Policía Nacional.
Tras enterarse de que los Juegos Olímpicos de Tokio se iban a posponer a 2021, pidió su reincorporación a su puesto de trabajo en la Brigada de Seguridad Ciudadana de Gijón, donde tiene su plaza.
Se incorpora a la Unidad de Prevención y Reacción (UPR), hasta que pueda volver a centrarse en sus entrenamientos de cara a los juegos de Tokio.
Saúl Craviotto, de 35 años, catalán de nacimiento y deportista de la Universidad Católica de Murcia (UCAM), calificó de sensato el aplazamiento de los Juegos Olímpicos de Tokio, “aunque sea un palo duro tras 3 años preparándose”.
Se reincorporó este miércoles a su puesto de trabajo, para poder echar una mano mientras se prolongue esta crisis sanitaria y el estado de alarma, para hacer frente con sus compañeros a la pandemia del coronavirus.
Craviotto hizo llegar un mensaje en nombre de la delegación española: “Nos dejaremos la piel más que nunca porque nuestro país se merece una alegría”.
En su pecho puede lucir sus cuatro medallas olímpicas, dos de ellas de oro, una de plata y una de bronce, siendo uno de los favoritos en los próximos juegos olímpicos.
Medallas de oro en Pekín 2008 (K2 500 metros) y en Río de Janeiro 2016 (K2 200), medalla de plata en Londres 2012 (K1 200) y medalla de bronce en Rio de Janeiro 2016 (K1 200).
“Nos dejaremos la piel más que nunca porque nuestro país se merece una alegría”.
“La decisión de que los Juegos sean en el verano de 2021 es la más sensata y correcta dada la situación que vivimos a nivel mundial. Es un palo duro porque llevamos tres años preparándonos para esa cita, pero es lo que toca y lo más importante es la salud. Los Juegos quedan en segundo, tercer o cuarto plano, y hay que hacer caso a las restricciones sanitarias y quedarnos en casa, que es la mejor forma de combatir esta pandemia y ya habrá tiempo de prepararnos” apuntó Saul en unas declaraciones difundidas por la UCAM.