El Sindicato Unificado de Policía en Navarra, sindicato policial mayoritario en el Consejo de la Policía Nacional ha denunciado el frío extremo con el que trabajan los policías en invierno y las temperaturas por encima de los 30 grados que soportan cada verano.
A día de hoy trabajadores y ciudadanos continúan padeciendo temperaturas insoportables en unas oficinas sin ningún tipo de ventilación y con un sistema de climatización averiado de forma perenne.
La Oficina de Extranjería de Pamplona es una de las dependencias policiales que más volumen de trabajo soporta. Pese a esto, sus instalaciones se ven sometidas a un progresivo deterioro y a un abandono sistemático por parte de la Delegación de Gobierno, máximo responsable de las dependencias. Esta situación se ha agravado los últimos días y ha disparado el riesgo de que ocurra alguna desgracia.
El delegado sindical del SUP en la Oficina de extranjería ha descrito la situación como “insostenible”. Afirma que debido a las altas temperaturas por la falta de climatización, la sala que alberga el servidor (del que depende el funcionamiento informático de toda la oficina), ha llegado a los 32 grados a primera hora de la mañana, marcando los 35 grados al medio día.
Añade el delegado que “por efecto de las altas temperaturas ha saltado la alarma de incendios varias veces y la solución de la Delegación de Gobierno ha sido colocar un ventilador que se ha estropeado a las pocas horas”.
Además, añade que los monitores donde se reflejan los turnos de los usuarios llevan meses estropeados, lo que acarrea disputas entre la gente, retraso en los trámites y un sinfín de problemas, no estando previsto que esta situación se vaya a solucionar.