Diferentes unidades de Policía Nacional y Guardia Civil se han desplegado en un amplio dispositivo con el objetivo de escoltar el féretro de José Antonio Primo de Rivera. Los restos del fundador de Falange han salido del Valle de Cuelgamuros con destino al cementerio de San Isidro.
Agentes de la Guardia Civil han comenzado el despliegue escoltando el vehículo fúnebre a su paso desde la carretera de Guardarrama (San Lorenzo de El Escorial) hasta el Cementerio Sacramental de San Isidro. Un trayecto de 53 kilómetros con competencias de ambos cuerpos que finaliza en el centro de Madrid.
Precisamente, en este destino final han tenido que desplegarse agentes de Policía Nacional, entre ellos efectivos de las UIP (Unidades de Intervención Policial) para controlar el orden ante posibles altercados por parte de simpatizantes que se concentraron a la espera de la llegada del féretro en el camposanto madrileño. Estas personas han coreado gritos como: “José Antonio Primo de Rivera. ¡Presente!” y “¡Arriba España!” acompañados del saludo fascista.
🔴 La policía tiene que intervenir en el cementerio de San Isidro para contener a los simpatizantes de Primo de Rivera ante la llegada de los restos mortaleshttps://t.co/OXIRLzFzBS pic.twitter.com/1yQEFNEfPs
— RTVE Noticias (@rtvenoticias) April 24, 2023
Los trabajos para la exhumación de los restos del fundador de Falange, José Antonio Primo de Rivera, han comenzado a primera hora de la mañana a puerta cerrada en la basílica del Valle de Cuelgamuros, antes llamado de los Caídos, rodeada de efectivos de la Guardia Civil. A continuación se dirigieron hacia el cementerio de San Isidro, en Madrid, donde la familia decidió que reposaran tras meses de negociaciones con el Gobierno.
Se trata del cuarto entierro de Primo de Rivera, detenido en marzo de 1936 y fusilado en Alicante cuando estalló la sublevación militar que dio inicio a la Guerra Civil. Tras el traslado de los restos de Franco y Primo de Rivera, queda pendiente la exhumación de 118 víctimas republicanas.
