Se ha abierto una investigación interna en la Comisaría de Villa de Vallecas, después de la aparición de un cartel de Vox en la sala del breefing.
El Jefe Operativo, ha emitido una orden interna para investigar los hechos. Según esta orden, los Policías que trabajaron durante la campaña electoral andaluza, pertenecientes a Seguridad Ciudadana y Grupos Operativos de Respuesta, deberán informar personalmente al Jefe Operativo sobre lo sucedido.
Literalmente dice: “Los funcionarios de Seguridad y Grupos Operativos de Respuesta (GOR) de esta Comisaría que hayan prestado servicio entre los días 27 de noviembre y 4 de diciembre del año en curso, informarán a este Servicio Operativo, mediante minuta individualizada, sobre la presencia de una banderola de un partido político en la Sala de Breefing, en la planta baja de estas dependencias”.
Ciertos medios de comunicación se han hecho eco de esta noticia, llegando a tachar como radicales, o sectores ultras, a los Policías que fuera de su horario laboral han demostrado simpatía hacia este partido político.
En este punto, se hace preciso recordar uno de los principios básicos de actuación de la Policía Nacional:
“Actuar, en el cumplimiento de sus funciones, con absoluta neutralidad política e imparcialidad.”
Debido a estos principios básicos, estamos de acuerdo que no se deberían lucir símbolos de ningún partido político dentro de las dependencias policiales.
Ahora bien, tampoco es de recibo tachar de ultras, radicales o extremistas a los Policías, por el simple hecho que en su vida privada apoyen a este partido político, o a cualquier otro.
Convendría preguntarse: ¿por qué no se utilizan estos adjetivos cuando los agentes son afines a partidos políticos de izquierdas?
Se comenta que el éxito de Vox en las elecciones, ha sido en gran parte por los “ultraderechistas” que hay en la Policía Nacional y por la movilización que han hecho a través de las redes sociales.
Lo cierto es que un medio de comunicación ha atacado gratuitamente a una de las instituciones mejores valoradas de España. Y todo para justificar el éxito de un partido político en las elecciones andaluzas.
