El amor de mi vida me ha llamado -por guasap que es como se dicen ahora las cosas- solemne estúpido. ¿Qué importa eso? Después de la descripción me ha dejado para siempre. Todos hemos cometido estupideces a lo largo de la vida. Hasta Sánchez, al que Felipe ha puesto hoy a caer de un burro. Le he oído impartir, en el programa de Susana Griso, una clase magistral de política que los asesores de Sánchez no han debido escuchar, dedicados como están a lamer suelos intentando blindar sus sueldos, alargándolos hasta que sea posible y dispuestos por ello a vender su alma al mismísimo diablo, si es que el diablo existe. A ver si soy capaz de resumir ese magisterio felipista: “La amnistía es un olvido. Con ello se les dicen que no cometieron ningún delito y que era el Estado el que estaba equivocado – ya verán como los apesebrados le llaman facha en cualquier momento. Y a Guerra y a Rodríguez Ibarra y a Belloch….-. ¿Se puede cambiar de opinión? -dice refiriéndose a Sánchez-. Si. ¿Se puede cambiar de opinión todos los días? No, porque los gobiernos tienen que ofrecer previsibilidad en su comportamiento para generar seguridad y confianza. Rectificar es de sabios y, de necios, tener que hacerlo a diario”.
Le pregunta la periodista si es un fraude que durante la campaña electoral se negase la posibilidad de una amnistía a los independentistas y justo después se hable de concedérsela. “No es un fraude – contesta Felipe González- está más próximo a la estupidez que al fraude” . Y tras explicar uno a uno los votos que en Cataluña ha sacado cada partido y cómo los socialistas han ganado con claridad a los puigdemones y a los esquerras, se pregunta el presidente González: ¿La pacificación, al armonización es decirle a los que han violentado el ordenamiento jurídico …con malversaciones… que tipo de amnistía hay para la malversación? Porque si la hay por razones políticas allí, tendrá que haberla en cualquier sitio en el que haya malversación. Y Griso hunde el cuchillo en la herida y sigue preguntando: ¿Cuándo el PSOE se sentó a negociar con sus rivales políticos la Constitución, encontró usted algo parecido a lo que ahora se está planteando, una amnistía a la carta para los independentistas? No, no, responde González. Yo llevo este debate al terreno político: Si se amnistían determinados comportamientos en función de las personas que tienen esos comportamientos y se excluye a las demás sería como cuando hablas de amnistía fiscal. Imagine usted que se hace la regularización fiscal para los ciudadanos de Cuenca. El resto no se pueden acoger”. Creo que lo he copiado bien, como en mis tiempos de coger apuntes, algo a lo que ahora no están acostumbrados los estudiantes inútiles porque el profesor sube los apuntes a la nube y se lo tiene que dar todo masticado. Menuda mierda.
Brillante González. Nos hemos cargado el principio de igualdad que llevo denunciando hace mucho tiempo. Las leyes ad hoc, para determinadas personas, son esencial e intrínsecamente injustas. Esa es la cuestión. Ya estoy cabreado para toda la mañana.
Solo me faltaba la cuestión israelí- palestina con dos fascismos, que dicen actuar en nombre de Dios, enfrentados a tiros y los ciudadanos indefensos como víctimas. Las religiones son peligrosísimas, pura antropología del poder. Veo gentes que se asombran de este feroz enfrentamiento como si fuese algo nuevo. No nos remitiremos a los relatos míticos del Antiguo Testamento, a Moisés, a Josué y a las murallas de Jericó cayendo al son de las trompetas y con el sol detenido para dar tiempo a terminar la faena. ¡Cuánta superchería! Vengamos al pasado más cercano, a la radicalización islámica de los santones caciques Ibn Sud e Ibn Wahab – ¿Les suenan las dinastías whabita y saudita? – Lean El terrorismo integrista, que escribí hace casi veinte años y que parece haber sido escrito ayer-. Por ahí van los tiros-. Vayamos al caso Dreyfus que se considera origen del movimiento sionista después de que los judíos fuesen criminalizados y perseguidos en tantos sitios – Lean el Libelo de Sangre de Sandra Aza con persecución de judíos incluida. Vamos a la fundación de los Hermanos musulmanes a los que pertenecieron Nasser, Anuar El Sadat o Yaser Arafat, germen cercano de islamismo radical. Y vamos evidentemente a la creación del estado de Israel que se come cada día un trozo de Palestina. Ahí han tenido el banderín de enganche miles de activistas islámicos distribuidos por el mundo y practicando la Yihad. Siempre hacen referencia al “problema palestino”.
¿Alguien, inocentemente, se puede creer que el Mosad, que controla cada milímetro cuadrado de terreno y todo lo que le interesa, no se enteró de que entraban misiles y armas y preparaban un ataque total los militantes de Hamás? Yo no me lo creo. Esto estaba todo preparado, escuché decir ayer a una voz autorizada comentando la situación, al borde del abismo, en que nos encontramos con esta historia: Israel como cuña inamovible en Oriente Medio, apoyado por americanos, ingleses, etc… Irán como potencia nuclear islámica. Siria en guerra no se sabe bien contra quien y apoyada por los rusos y todos los islamistas del mundo usando esta situación demoníaca – con la opresión de los palestinos en primera fila- para fundamentar cualquier ataque contra occidente diciendo que es un movimiento de defensa legítima. ¿Hay quien de más?
Personalmente no me preocupa este avispero mortal porque a estas alturas de la vida, si uno no muere de una cosa, muere de otra, pero… tenemos hijos y nietos y dejamos el mundo hecho una pocilga plagada de muertos y de gente que quiere matar por puro afán de poder, por expansionismo, porque el negocio de las armas tiene que seguir floreciente.
Ayyyyy, señor. ¡Llévame pronto! Pero no antes de acudir a la exposición que andan preparando en el Casino de Alicante que no me la quiero perder por nada del mundo. Alfonso Navarro – arquitecto famoso- y Antonio Moreno – letrado ilustre- organizan una exposición de poesía y pintura que son términos casi sinónimos, mezclados, indisolubles, con cuadros y poemas de los últimos cuarenta años de la transición, con protestas, reivindicaciones y erotismo a raudales. Quiero verla.
También quiero leer el último libro de mi amiga Sonsoles Ónega. Las hijas de la criada, que definen como una historia narrada junto al fuego en un remoto pazo gallego, con venganzas, luchas de poder, abandonos – verbi gracia el del amor de mi vida- y luchas de poder- la vida misma, lo que vemos ahora en cada rincón del mundo-.
No soy amigo de los premios Planeta ni de ninguno. Las editoriales – todas, y tiro piedras contra mi tejado algo que me está permitido a las puertas del crematorio- buscan el negocio y no la excelsa creación literaria. He leído en tres días mil y una critica contra Sonsoles de gente que no es capaz de escribir ni la mitad que ella.
No he leído aún este libro de Sonsoles Ónega, pero les aseguro a los que ya le están dando leña que no es ninguna advenediza en la literatura. Será guapa – ¿se puede decir esto sin que se te echen encima las hordas de progres?- será famosa…pero escribe de puta madre. Lean, por favor, incluso antes de las hijas de la criada “Después del amor” una historia tórrida de pasión, cuernos y política, que solo puede ser escrita por una mujer genial. Una historia de actualidad palpitante, con los catalanes sublevados proclamando republicas independientes y la Greta Garbo barcelonesa colgada hasta las trancas de un capitán golpista que, cuando el general Batet Mestres – fusilado por Franco en agradecimiento por los servicios prestados al país- se plantó en la puerta del Palacio de la Generalitat huyó como una rata de cloaca por las idem de la plaza de Sant Jaume.
Señores criticones que no han leído el libro de “Las hijas de la criada”, elanlo primero y peguen los palos después si procede. Sonsoles, mi amiga, pero no por eso tengo ningún compinchamiento con ella, es una escritora de primerísima magnitud. De casta le viene al galgo. Sin ser forofo de los Planeta ni de ningún otro premio pues siempre he pensado que ….bueno me lo callo que tampoco hay que cantarlo todo. Esperando estoy que me llegue el libro para hacer una crítica fundamentada en su lectura, seguro que placentera y pedagógica. Un abrazo, querida Sonsoles y disfruta tu premio por encima de cualquier otra consideración.