UGT reclama reducir drásticamente la precariedad laboral en este ámbito, establecer mecanismos más adecuados de financiación de la I+D empresarial, abandonando la política de créditos y optando por las subvenciones o ayudas directas, simplificar las cargas burocráticas de los equipos investigadores, o mejorar la colaboración transversal y público/privada, entre otras.
El Secretario General de UGT, Pepe Álvarez, ha trasladado al ministro de Ciencia e Innovación, Pedro Duque un documento de análisis sobre la situación actual de la ciencia y la innovación en nuestro país, en el que se incluyen propuestas que el Sindicato considera necesario implementar para que el Pacto por la Ciencia no quede en una más de las muchas declaraciones de voluntad que se han producido en el pasado.
El Sindicato identifica, en dicho documento, cuatro grandes problemas sistémicos de nuestro sistema de ciencia e innovación:
- Fuertes cargas burocráticas, que ocupan buena parte de la jornada de trabajo de los equipos investigadores por falta de una estructura administrativa complementaria, un estricto sistema de control de cuentas y supervisión de gastos que lastra el normal desarrollo de los proyectos de investigación, excesiva atomización y compartimentación de los grupos de investigación, y anticuados modelos de organización en Universidades y centros públicos de investigación.
- Plantillas envejecidas, talento a la fuga y falta de carrera profesional: la edad media del personal investigador supera los 50 años (sin renovación por las restricciones públicas a la contratación y la prohibición de aumento de la masa salarial en el sector público estatal), mientras miles de jóvenes doctores emigran al extranjero por falta de oportunidades laborales en España. En cuanto a la precariedad, actualmente hay 4.500 trabajadores eventuales en proceso de estabilización en toda la AGE.
- Debilidad de nuestras infraestructuras científicas: la baja dotación presupuestaria hace imposible renovar equipamientos o invertir en tecnologías y sistemas de comunicaciones, o la implementación de procesos de digitalización y de plataformas tecnológicas.
- Falta de coordinación entre el sector público y el privado: el gasto empresarial español en I+D (0,7% del PIB, y tan solo un 15% de nuestras empresas innovando) nos sitúa muy lejos de la media de la UE (1,45% del PIB). Los incentivos son inadecuados.
Más empleo público, menos precariedad y subvenciones a las empresas
Ante esta situación, UGT plantea una una serie de propuestas, actuaciones mínimas y urgentes para que el Pacto por la Ciencia y la Innovación sea efectivo:
- Incrementar la oferta pública de empleo en los organismos públicos de investigación, tanto para personal científico como auxiliar de investigación y de apoyo a la investigación.
- Desarrollo de un auténtico sistema de carreras profesionales dentro de los Organismos Públicos de Investigación (OPI).
- Reducción drástica de la precariedad laboral agilizando el Plan de Estabilización del personal laboral temporal de los OPI y la Agencia Estatal de Investigación; aumentando el ritmo de implantación del RD 310/2019, y desarrollando la carrera profesional para técnicos y tecnólogos (que quedaron fuera del RD); activar un plan de retorno del talento joven emigrado al extranjero ofreciéndoles salarios dignos y condiciones laborales atractivas (como podría ser un modelo de contratos tipo Tenure Track, contratos temporales de cinco años convertibles en permanentes tras una evaluación).
- Aumentar las partidas presupuestarias destinadas a la I+D hasta alcanzar el objetivo del 3% del PIB en todos los estados miembros de la UE en 2030.
- Establecer mecanismos más adecuados de financiación de la I+D empresarial, abandonando la política de créditos, optando por las subvenciones.
- Abordar cambios organizativos, como reformar la Agencia Estatal de Investigación desde el punto de vista financiero y de los recursos humanos; dotar de recursos humanos y tecnológicos a la gestión de proyectos y programas; recuperar la Comisión Interministerial de Ciencia y Tecnología; volver a unificar los ministerios de Universidades y Ciencia e Innovación, y aumentar la dotación presupuestaria para programas transversales como el Misiones Ciencia e Innovación del CDTI.