En un escándalo que ha sacudido los cimientos de la seguridad nacional, las bandas de narcotraficantes conocidas como “Miami” y “Niño Skin” han logrado acceder a información confidencial de 130.000 agentes de policía, incluidos aquellos encargados de investigarlos. Según revelaciones del periódico El Mundo, este acceso indebido pone en riesgo no solo las operaciones policiales, sino también la seguridad personal de los agentes involucrados.
La filtración de datos incluye información sensible como nombres, direcciones y detalles operativos, lo que podría facilitar represalias y comprometer investigaciones en curso. Las autoridades están trabajando para determinar cómo se produjo esta brecha de seguridad y quiénes son los responsables directos de este ataque informático.
Este incidente subraya la creciente sofisticación de las organizaciones criminales en el uso de tecnología para evadir la justicia y proteger sus operaciones ilícitas. Mientras tanto, la sociedad espera respuestas contundentes y medidas que garanticen la integridad de las fuerzas del orden.