A pesar de que al principio de la pandemia de coronavirus que estamos sufriendo a nivel global el uso de las mascarillas creó un agrio debate, desde hace meses estos dispositivos se han convertido en los símbolos de estos tiempos que nos han tocado vivir. Tanto en espacios exteriores como en interiores su uso es masivo, aunque solo sea por su obligatoriedad desde el 19 de mayo, cuando el BOE publicó la orden que regulaba su uso y que aún está vigente. Solo los menores de 6 años y todas aquellas personas que padezcan una enfermedad incompatible con su uso están eximidas de llevarlas. Todo parece indicar que las mascarillas serán parte de nuestro paisaje cotidiano durante este año 2021, a pesar de que la vacunación haya dado comienzo.
Es importante que aquellas que utilices cumplan con la normativa, como las mascarillas de calidad española en Caja Cartón Embalaje. No llevarlas en espacios públicos interiores o exteriores pueden suponer una multa de 100 euros, aunque en virtud de la Ley de Protección de la Seguridad Ciudadana (en su artículo 36.6), podrían llegar a entre 601 y 30.000 euros en el caso de que la infracción cometida se considere grave.
¿Cuándo debes usar la mascarilla?
El uso de las mascarillas se convierte en obligatorio en el momento que traspases la puerta de tu domicilio (se llegó a hablar de la obligatoriedad en el interior de las viviendas, aunque se desechó su imposición por la imposibilidad de controlar su uso).
Los desplazamientos por medios de transporte son unos de los principales focos de contagio, por lo que el uso de la mascarilla está especialmente controlado, ya realices el recorrido en tren, avión, moto, Uber, taxi o autobús.
Los únicos casos en los que no es obligatorio el uso de la mascarilla son los siguientes:
- Los menores de 6 años, como se ha indicado con anterioridad.
- Las personas con patologías incompatibles con su uso.
- Las personas convivientes en el mismo domicilio que viajen en el mismo coche.
En el resto de los casos, tanto en interiores como en exteriores, el uso de la mascarilla es obligatorio, a no ser que se esté desarrollando algún tipo de actividad que resulte incompatible o por hallarse en un estado de necesidad o de fuerza mayor que lo impida.
Infracciones graves por no usar la mascarilla
Llevar mascarilla es actualmente una obligación cuyo incumplimiento puede ser denunciado a través de la Ley General de Salud Pública, en el caso de no llevarla puesta, con una sanción de 100 euros, o bien por no atender a los requerimientos de ponérsela por parte de un agente denunciante, momento en el que la infracción pasaría a ser grave y la multa podría ascender hasta los 30.000 euros.
El uso de la mascarilla en todo tipo de espacios públicos ya no se trata únicamente de una cuestión de salud, tanto de quien la porta como de quienes lo rodean, puede afectar también de una forma muy seria a nuestro bolsillo. Todo parece indicar que la pesadilla pandémica que estamos sufriendo terminará este año. Hay que tener paciencia y, en beneficio de todos, cumplir estrictamente con las normativas referentes al uso de las mascarillas y demás medidas de protección.