La gota que ha colmado el vaso ha sido la publicación en el Twitter de Instituciones Penitencias una resolución judicial en la que un sindicato de trabajadores penitenciarios, ACAIP-UGT, reclamaba judicialmente por las funciones a realizar por el personal penitenciario en segunda actividad.
El hecho en sí no es la resolución judicial, si no que es la primera vez que se hace pública en una red social de la administración nacida para dignificar a un colectivo de trabajadores una resolución en la que se castiga verbalmente a un sindicato.
Nadie entiende el por qué de “desestima de esta forma, y con imposición de costas al recurrente, la demanda presentada por el sindicado ACAIP”, hecho este que han considerado desde el conjunto de todos los sindicatos de la administración una provocación y humillación innecesaria, y así lo han hecho saber los trabajadores en redes sociales, y es que tanto trabajadores como sindicatos consideran que la administración ha dado un paso más que ha roto los lazos de cordialidad entre las partes al hacer uso de manera partidista y desproporcionada las redes sociales para humillar a un colectivo.
Así, ante tales hechos, las consecuencias no han tardado en llegar, y la asociación profesional de trabajadores penitenciarios Tu Abandono Me Puede Matar –TAMPM, ha tomado la determinación de dejar de seguir la cuenta abierta en junio del 2020 de Instituciones Penitenciarias, @IIPPGob.
Las razones que señala son muchas, pero básicamente resumen en que como profesionales penitenciarios no se sienten representados esa cuenta “oficial” de Twitter.
“No identificamos ni reconocemos la imagen sesgada y parcial que se publica en la cuenta de Twitter con la totalidad de la realidad penitenciaria, y tampoco ha tenido ni está teniendo ninguna aportación para ayudar a dignificar al colectivo de trabajadores penitenciarios ni a mejorar una imagen profesional desvirtuada en la sociedad por la desinformación y oscurantismo de la propia institución y alimentada culturalmente por mitos y prejuicios”.
Sin empatía ni escucha activa hacia su colectivo de trabajadores
Los trabajadores penitenciarios erróneamente pensaban que por fin, como había pasado con otros colectivos, se iba a tomar en serio y en valor por parte del “Estado” el objetivo de mejorar la imagen de todo un colectivo de trabajadores y legitimarlos de cara a la sociedad.
Un colectivo por otra parte que en su mayoría tiene titulaciones universitarias y a pesar del grado de preparación académico, está acostumbrado al anonimato, la invisibilidad, la ausencia de promoción profesional y al desconocimiento social de su profesión.
Un colectivo que trabajan con personas haciendo una gran labor para la sociedad y la seguridad, muchas veces con rasgos humanitarios.
Son unos trabajadores que hubiera sido muy fácil “complacer” con muy poco, tan solo unas palabras de aliento y el sentimiento de apoyo institucional después de las múltiples agresiones que están sufriendo dentro de las prisiones por parte de los presos.
Señalan que sobran los motivos para dejar de seguir la cuenta de Twitter @IIPPGob, y respetando siempre la libertad individual de las personas invitan al resto de los trabajadores penitenciarios a que también dejen de seguir esta cuenta si no se sienten representados por ella como profesionales, y para ello esgrimen sus razones que no dejan a nadie indiferente.
Las razones de TAMPM por las que no se debe seguir a Instituciones Penitencias en Twitter
¿Qué menos podría esperar un trabajador de la institución para la cual trabaja y que en su jornada laboral termina en un hospital por lesiones debido a una agresión por un preso?
Unas palabras de apoyo o un reconocimiento a su profesionalidad desde un altavoz oficial como hubiera sido un simple tuit de 280 caracteres, aunque fuera por una cuestión de ética y cortesía.
“Fiel seguidora al dogma “si no se escribe, si no se habla, no existe” lamentablemente por parte de @IIPPgob hay NADA, vuestra respuesta hacia todas estas agresiones que estamos sufriendo en la cuenta de Twitter ha sido el silencio, la omisión, la negación”.
Trabajando en prisiones cargamos en nuestra vida laboral la “espada de Damocles” de pertenecer a una institución que cuestiona permanente nuestra labor profesional y nos pone en tela de juicio cada vez que hay una intervención, ni siquiera nos habéis ofrecido una garantía de protección jurídica ni nos habéis apoyado para ser dotados de la condición de “Agentes de la Autoridad”. Todo esto sin mencionar la falta de escucha y empatía al resto de reivindicaciones que los profesionales penitenciarios llevamos denunciando después de años de abandono.
La administración penitenciaria ni os habéis hecho eco de las demandas laborales, ni sois voz ni altavoces de sus profesionales, ni siquiera habéis intentado ser mediadores.
Sin un gesto de mediación o de justicia restaurativa para vuestros trabajadores en un proceso continuado de deterioro y decadencia de este servicio público esencial, la desafección y desmotivación sigue in crescendo de un cuerpo de profesionales envejecido, mermado hasta situaciones límites de efectivos, sin medios ni preparación, sin dignificación salarial ni laboral, sin sectorización que reconozca su especifidad.
Con la certeza que a @IIPPGob poco le importa la satisfacción laboral de sus trabajadores, como si fueran un mal necesario a soportar, actuando de manera opuesta a todas las bondades que publicitan en su supuesta “Arcadia Penitenciaria” y comportándose como un rey Busiris cruel, tirano y vengador para sus plebeyos, imponiendo el miedo, la censura, la mordaza, el castigo a cualquiera que ose romper esa imagen quimérica, utópica y artificial construida como una cortina que oculta la realidad y complejidad de la vida dentro de prisión.
Falacia de Verdades a Medias
Las verdades a medias son frases engañosas y falsas, aunque incluyen algún elemento de verdad, pueden ser parcialmente verdad, o incluso verdad pero no toda la verdad, lo que produce un engaño provocado por omisión. Es una manipulación del mensaje en la comunicación.
La cuenta de Twitter @IIPPGob actúa como siempre ha actuado Instituciones Penitenciarias a la hora de mostrar la realidad penitenciaria a los diferentes agentes y personalidades sociales del exterior, esto es con parcialidad, oscurantismo y falta de transparencia. Ocultando todo aquello que podría ser polémico o poco agradable a la vista y la conciencia de lo que supuestamente debería ser un sistema penitenciario modélico de reinserción y reeducación.
Los profesionales penitenciarios que trabajamos dentro de las Prisiones Españolas hemos vivido como durante años, en una prisión por ejemplo con 10 módulos, 2 de ellos Módulos de Respeto o Unidades Terapeúticas, con internos/as modélicos en su comportamiento, y siendo el resto de la prisión los 8 módulos ordinarios e incluso alguno de aislamiento, cuando se produce una visita del exterior, ya sea de un cargo político, un medio de comunicación, etc.. la ruta, tourné elegida por parte de la Dirección del Centro siempre es el recorrido por las zonas “bonitas” de la prisión, son esos módulos de respeto, UTE, la biblioteca, algún taller productivo que por cierto pocos internos tienen acceso a estos trabajos remunerados, se enseña ese 20% de la prisión y se oculta un 80%, no es que ese 20% no sea verdad, es auténtico, pero hay una ocultación intencionada de la otra parte que también es verdad y auténtica, sería “una verdad a medias” en lógica, una falacia.
Tenemos muchos ejemplos desde que se abrió la cuenta de Twitter de @IIPPGob de esta manera de actuación. Por ejemplo cuando en las pasadas navidades, mientras se seguía sufriendo agresiones, mientras fallecieron algunos internos, ya sea por sobredosis de la propia medicación entregada para varios días por falta de personal sanitario, etc, la cuenta oficial publica la imagen de un Belén de mazapán hecho en un taller de panadería en una prisión, una anécdota minúscula y agradable, que no refleja la realidad tan dura que se vive en estas fechas dentro de las prisiones.
Esta manera de poner el acento en noticias edulcoradas y “gratificantes” para esconder las carencias, deficiencias y sus consecuencias dramáticas de la también realidad penitenciaria, es el resultado de la construcción de un discurso infantilizante, pueril, reflejo de la desinformación de un medio de comunicación oficial para disimular su negligente gestión.
Promoción del tercer sector (ONGs) en detrimento de la labor de los profesionales penitenciarios
El protagonismo que desde la cuenta de @IIPPGob se da al tercer sector y las entidades no penitenciarias en los procesos de reinserción, nos hace sospechar, entre otras cosas, que lo que en un principio se veía como una colaboración de entidades en el tratamiento de la población reclusa, la administración ha elegido delegar esta responsabilidad en voluntariado, las ONGs, en vez de invertir en más personal profesional para llevar la labor de tratamiento individualizado.
Recordamos que durante esta época de pandemia, el personal no penitenciario no podía entrar en prisión por las restricciones por el covid-19, entre este personal están las ONGs, así que hemos sido los profesionales penitenciarios los que hemos estado durante meses las 24 horas al día con los internos/as, llevando con la máxima normalidad posible la convivencia y la vida dentro de la prisión. Mientras tanto la cuenta de @IIPPGob seguía promocionando y publicitando a estas entidades.
A pesar de lo “lucido” que puede quedar en la cuenta de Twitter el nombre y la programación de los talleres de las ONGs, muchos de estos talleres de organizaciones de voluntariado se realizan durante un par de horas a la semana dentro del centro penitenciario, sin dudar de los beneficios y el enriquecimiento que aportan a los/as internos/as que participan en ellos, creemos que el tratamiento individualizado no se puede sustentar estructuralmente en ellos, con una población reclusa compleja y heterogénea, un porcentaje muy alto de enfermos psiquiátricos graves, el eje y la base del tratamiento debe ser más profundo, profesional, terapéutico y continuado.
Los seguidores de la cuenta de Twitter
Es una paradoja que no cumpla sus objetivos una cuenta que supuestamente está creada según su definición y presentación para acercar a la sociedad el trabajo que realizan los funcionarios de Prisiones, dar información útil a las familias de los internos, y facilitar actualidad y legislación.
Curiosamente si se hace un repaso de las cuentas de twitter que siguen a @IIPPGob, el grosso son cuentas oficiales como las de Delegaciones de Gobierno y Subdelegaciones, entidades docentes y preparadores de opositores, periodistas, etc… podemos hacer la lectura según estos perfiles, que la motivación y el interés de estas cuentas es el seguimiento del “relato oficial” que ofrece Instituciones Penitenciarias de cara al público, por encima de un interés real por el conocimiento de la realidad global dentro de las Prisiones Españolas.
Sobre la manipulación informativa
Los recursos que se utilizan para manipular a la población van desde la mentira flagrante hasta la simple omisión de información, pasando por las verdades a medias, la propagación de rumores o la desinformación.
El uso de técnicas como la descontextualización, la generalización o la desorganización del contenido. También se juega con la forma de utilizar el lenguaje y diversas formas de eufemismos. Por ejemplo, expresiones como “fuerzas de paz”, “daños colaterales” u “operación quirúrgica” tienen por objeto dulcificar la información sobre conflictos armados para que las guerras parezcan un mal menor en lugar de las verdaderas tragedias humanas que son.
La esencia de la manipulación informativa radica en el control de las ideas. Por una parte, lo que se repite hasta la saciedad cala entre el público y se convierte en verdad absoluta, aunque no lo sea.
Ya decía Joseph Goebbels, el artífice de la propaganda nazi, que “una mentira repetida mil veces se convierte en verdad”. Por otra parte, de lo que no se habla en los medios de comunicación, sencillamente no existe, queda fuera del debate de las ideas y desaparece del espacio público. Apuntes sobre el poder y los generadores de opinión y del relato.
Por todo lo anterior resulta indispensable el pensamiento crítico que nos permita desvestir del ropaje del engaño la información que se recibe.