Los CDR se organizan a través de sus redes de comunicación difundiendo un protocolo con el que bloquear carreteras usando pegamento instantáneo.
El objetivo es inyectar cápsulas de masilla química de anclaje instantáneo sobre el asfalto para después fijar varillas de acero o hierro.
“Ya puedes estar seguro de que tendrán que levantar la carretera por completo”, asegura un insurrecto tratando de instruir a sus fieles ideológicos mientras da instrucciones precisas sobre la forma de anclaje perfecto.
Las órdenes son difundidas a través de un canal de Télegram de Anonymus Catalonia que cuenta con más de 264.000 seguidores.
Esta técnica se inspira en las ya utilizadas por los manifestantes en Hong Kong para frenar el avance de los indicativos policiales.
Los organizadores del Tsunami Democrátic pretenden incrementar su poder de acción con medidas más contundentes como esta.
Ya no vale con incendiar contenedores ni neumáticos. Pretenden encontrar un método más poderoso con los que ralentizar la vuelta a la normalidad una vez ejecutadas sus medidas de represión.
Conque solo son alteraciones de Orden Público
Ese pegamento lo llevan políticos en el sillón que lo permiten