Desde esa fecha, la Guardia Civil ha solicitado al Ayuntamiento de Galapagar, los permisos necesarios para la instalación de una caseta prefabricada, donde los agentes puedan cumplimentar el servicio en dignas condiciones.
¿Qué menos que disponer de un baño para satisfacer las necesidades fisiológicas más elementales? ¿o de calefacción para mitigar el frío del invierno?
Ante la ausencia de respuesta por parte del citado ayuntamiento, la asociación Unión de Guardias Civiles ha decido instalar un aseo portátil provisional a la espera de la ansiada caseta. “Hemos querido denunciar mediante este hecho simbólico la precariedad que sufren nuestros compañeros y compañeras”, aseveran.
Resulta verdaderamente humillante, las penosas condiciones dispensadas a los miembros de la Guardia Civil que prestan este servicio.
Desde Policía H50 pedimos máximo respeto hacia nuestros compañeros guardias civiles y una inmediata solución que ponga fin a tal lamentable situación.
Periódico digital Policía H50
