Un cayuco con 47 inmigrantes subsaharianos alcanzó durante la madrugada del 5 de enero la playa de El Cabezo, en Granadilla de Abona (Tenerife). La travesía por la denominada Ruta Canaria se saldó con tres heridos y cuatro fallecidos, los primeros registrados durante el año 2021.
Los primeros testigos de la llegada del cayuco dieron la voz de alarma al Centro de Emergencias 1-1-2 Canarias, desplazándose al lugar para prestar la primera asistencia sanitaria efectivos del Servicio de Urgencias Canario (SUC), Cruz Roja y Atención Primaria. A la zona también fueron movilizados indicativos de la Guardia Civil, Policía Nacional y Policía Local para ayudar en las labores de auxilio.
En su interior se localizó a tres cadáveres que habrían fallecido durante la travesía. La cuarta víctima mortal, fallecería en la misma playa, a consecuencia de una parada cardiorrespiratoria, a falta de examen forense. Otros tres subsaharianos fueron trasladados al centro de salud El Mojón, por quemaduras y erosiones de poca consideración.
Finalmente, serían 43 los inmigrantes que pudieron llegar con vida a la isla de Tenerife, entre ellos, una sola mujer y 17 menores. La Policía Nacional es el Cuerpo encargado de tramitar y gestionar la situación administrativa en nuestro país de los supervivientes.
Esta madrugada un cayuco con 47 migrantes subsaharianos arribó por sus medios a la playa de El Cabezo, en Granadilla #TENERIFE Personal sanitario de #SUC @CruzRojaProvTfe y Atención Primaria han confirmado 4 fallecidos y 3 traslados al centro de salud por quemaduras y erosiones.
— 1-1-2 Canarias (@112canarias) January 5, 2021
Primeros inmigrantes fallecido de 2021
Se trata de los primeros inmigrantes muertos intentando alcanzar el archipiélago por la conocida Ruta Canaria. Según datos de la Organización Internacional para las Migraciones de la ONU, durante el paso año fallecieron más de 600 personas intentándolo.
Mientras tanto, el flujo de inmigrantes subsaharianos durante estos primeros compases de año, en su inmensa mayoría varones, siguen llegando ilegalmente a Europa sin cesar, usando las Islas Canarias como puente más sencillo.
Un territorio que se encuentra ahora mismo totalmente desbordado e incapaz de soportar la fuerte presión migratoria que está sufriendo, mientras los políticos y dirigentes parecen mirar para otro lado. Unas dificultades que se acrecienta en gran medida por las razones sanitarias ligadas a la COVID-19.
Cabe recordar el reciente fallecimiento de un policía nacional destinado en la V-Unidad de Intervención Policial de Málaga, contagiado por coronavirus mientras prestaba servicio en la isla de Gran Canaria por la llegada masiva de saharianos.