Tras estar separado unos días de la vida pública por un problema grave de salud que le llevo a un ingreso con pronóstico reservado, el joven político, Antonio Abarca, ha vuelto a la actividad colaborando con h50 y concediendo esta pequeña entrevista.
En primer lugar, ¿Cómo se encuentra? Hemos pasado por momentos mejores de salud, pero tengo las ganas y la fuerza para seguir defendiendo los derechos de mis FFCCSE.
¿Cuál es su opinión sobre el modelo policial actual? ¿Qué mejoras y cambios propone? Desde mi punto de vista históricamente las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado no han estado atendidos, han sido únicamente utilizados en épocas electorales y los que queremos esta institución nos avergüenza. El papel vocacional de los hombres y mujeres que forman las FFCCSE y su enorme capacidad de servicio público les ha conferido los gobiernos no tengan a los trabajadores de este sector como prioridad. Y lo es. Tanto como el servicio que prestan.
¿Qué es lo primero que hay que hacer? Primeramente cumplir con la palabra dada y dar un equiparación real de forma inmediata, posteriormente reponer gradualmente las vacantes de Policía Nacional y de la Guardia Civil. Debemos apoyarnos en otras instituciones, por ejemplo, la formación, investigación y el desarrollo a través de convenios con universidades. Seguidamente dotarles de los recursos necesarios y de uniformidad adecuada y adaptada a cada necesidad o dispositivo para que puedan realizar su trabajo con total seguridad.
Debemos decretar la gratuidad o bonificación con un tope máximo después de la jubilación por edad o enfermedad de nuestros funcionarios. Además, es insostenible el hecho de pagar de por vida los medicamentos por la perentoria necesidad de medicinas llegada la vejez.
Una apuesta clara por la descentralización creando unidades territoriales, tanto de la Policía como de la Guardia Civil. No debe olvidarse el Plan de Infraestructuras para la Seguridad del Estado 2019-2026 ya que tenemos comisarías que nos debería dar vergüenza que trabajaran en esas condiciones nuestros funcionarios/as y puedo decirlo, pues son muchas las que he pisado.
¿Qué es lo que más le preocupa? Si me preguntara usted qué es lo que más me preocupa le contestaría que en la actualidad tengo el corazón divido, en un primer lugar como muchos grupos políticos, sus dirigentes y parte de la sociedad, denigran la imagen de aquellos que anteponen su vida a la de cualquier ciudadano. Aquellos a los que muchas veces hemos tenido que acompañar en sus últimos momentos, por decidir elegir una profesión que es proteger al más débil y a su país. Y en el ámbito de la nación me preocupa el terrorismo, debemos fortalecer la coordinación de los cuerpos y el enfoque de inteligencia con el fin de desarrollar en mayor medida nuestras fortalezas.
¿Qué opina sobre los problemas de competencias entre la Policía Nacional y la Guardia Civil? No estuve de acuerdo con los mandos diversificados, así que aplaudo lo que ha hecho Grande-Marlaska de establecer una estructura de Policía Nacional y Guardia Civil para ganar en coordinación y, por lo tanto, en eficacia. Está muy bien recuperar la figura del Director Adjunto Operativo. No hace falta un mando único tampoco. El trabajo de Director General de la Policía Nacional de Francisco Pardo Piqueras y para la Dirección General de la Guardia Civil de Félix Azón, ha supuesto un gran paso adelante en eficiencia. No es suficiente, empero, hay que reforzar aún más la coordinación y poner al frente de las Delegaciones y Subdelegaciones de Gobierno a los más capaces, que conozcan la institución y los problemas de la ciudadanía.
Imagine un momento, es usted Ministro del Interior ¿Qué Director General de la Policía nombraría? Lo tendría muy claro, una persona con templanza, capacidad de gestión y criterio de Estado. Debe ser uno más de entre los funcionarios y estar más en la calle que en el despacho. Y desde hace años era lo que necesitaba la institución y llegó, Francisco Pardo Piqueras, es la mejor persona para dirigir la Policía Nacional. Reúne todas las cualidades y aparte es una persona buena, en el más amplio sentido de la palabra. En la actualidad conformó la mejor Junta de Gobierno de la historia de la institución.
¿Y en la Jefatura Superior de Madrid? (Risas) Si antes lo tenía claro, aun lo tengo más, no solo la persona que encabezaría la jefatura, una persona ejemplar, trabajadora… Pero ya le digo que el cambio sería de arriba abajo y de abajo arriba. No podemos permitir que los madrileños se sientan inseguros, solo podemos hacerlo potenciándolo desde una jefatura fuerte.
Finalmente, en referencia a la actual situación política, ¿Usted pactaría con partidos independentistas? Yo siempre realizaría acuerdos con aquellos que estén dentro del marco legal, de la Constitución o del funcionamiento democrático.
Finalmente, quiero agradecer vuestro apoyo en todos los momentos.