La Policía Nacional liberó, en aparente buen estado, a una mujer que estaba retenida por su ex pareja en un piso de Leganés (Madrid), según informaron fuentes de la investigación.
Los sanitarios del SUMMA atendieron a la mujer tras ser liberada, que tenía algunas contusiones en el abdomen y una fuerte crisis de ansiedad. También asistieron al secuestrado, que presentaba cortes superficiales en las muñecas. Tras curarle, fue esposado y trasladado a la comisaría por la Policía Nacional.
Los hechos se desencadenaron minutos antes de las 07:15 en un ático situado en el barrio de La Fortuna de Leganés. Un hombre de 30 años y origen magrebí llegó al lugar e, intimidando con un cuchillo, entró en la vivienda, según algunos testigos.
En el interior se encontraba Olga, una mujer española de unos 45 años, su dos hijos de 12 y 15, y un amigo de la familia. Éste salió a la calle como pudo, mientras que la mujer fue retenida violentamente por el agresor, que según algunos testigos tenía sangre debido a una posible refriega con los moradores de la vivienda.
Los vecinos llamaron a la Policía despertados por los gritos de “Te voy a matar, te voy a matar”, proferidos por el secuestrador hacia la retenida, que respondía con “Deja a mis hijos en paz”. Los residentes en el edificio también escucharon algunos gritos en árabe y relataron que las discusiones entre ambos eran constantes en los últimos meses.
Los primeros en llegar fueron agentes de la comisaría de Leganés, que contuvieron la situación. Pero ante la gravedad de los hechos, ya que el hombre tenía secuestrada a la mujer en la casa y amenazaba con matarla llevado por unos posibles celos que tendría respecto a las relaciones actuales de la víctima, hasta el lugar acudieron agentes del Grupo Especial de Operaciones (GEO) y negociadores de la Policía Nacional. Éstos consiguieron que, unas dos horas más tarde, el hombre liberara a los hijos de la mujer, que fueron asistidos por psicólogos del SUMMA y que resultaron ilesos.
Tras varias horas de negociación, los policías han logrado rebajar la tensión. Los GEO se fueron apostado por diversos puntos del edificio y también por el tejado, ya que el hombre tenía retenida a su ex mujer cerca de una terraza del ático del edificio. Finalmente, los agentes utilizaron una pistola táser para inmovilizar con éxito y posteriormente detener al agresor, según confirmaron fuentes policiales.
El hombre está acusado de secuestro, lesiones y amenazas, entre otros posibles delitos. Tenía antecedentes policiales de 2015 por lesiones y robo con violencia, pero no por violencia de género. De hecho, no había denuncia de la víctima ni órdenes de protección sobre ella, según detalló un portavoz de la Jefatura Superior de la Policía de Madrid.
Antonio Abarca