Agentes de la Policía Nacional de la Jefatura Superior de Policía de Navarra en Operación conjunta con agentes de Policía de la Comisaría Provincial de Ciudad Real, han procedido a la detención de tres personas de origen sudamericano y a la imputación de otras dos personas, como presuntos autores de los delitos de tráfico de drogas y defraudación de fluido eléctrico tras el hallazgo de una nave industrial, en la cual se había instalado un cultivo con cerca de 6.000 plantas de marihuana.
La nave donde operaban los detenidos, la organización disponía de una superficie de cerca de 400 metros cuadrados y se encontraba ubicada en un Polígono Industrial próximo a la capital Foral.
La investigación se inició a principios del mes julio, tras recibirse de forma anónima a través de los canales de colaboración ciudadana de Policía Nacional, información relativa a una plantación de marihuana “indoor” de última generación, en una nave sita en un Polígono Industrial de Navarra.
Los investigadores de Ciudad Real, contactaron con los especialistas antidroga de la Jefatura Superior de Policía de Navarra y decidieron investigar dicha denuncia anónima de forma conjunta.
Tras analizar la información recibida, los investigadores iniciaron los correspondientes dispositivos de vigilancia en las instalaciones de polígonos industriales que respondían a las características buscadas, hasta lograr determinar la ubicación exacta de la nave industrial implicada, así como la total identificación de los presuntos autores del tráfico de drogas.
Una vez determinada la participación de los mismos, se estableció el correspondiente dispositivo operativo, que culminó con la detención de los tres principales encartados, la imputación de otras dos personas y la incautación de 5.830 plantas de marihuana tras el registro efectuado en la nave industrial.
Perfeccionamiento y profesionalización de las plantaciones “indoor”
Los investigadores han detectado un perfeccionamiento progresivo de las plantaciones “indoor”, siendo su producción más intensiva desde los puntos de vista cuantitativo y cualitativo. Esto se debe a las mejoras en la selección de las semillas y a la gestión de los cultivos con sofisticados sistemas de fertilización, climatización y utilización de tecnología de última generación, que permiten una producción permanente de cosechas de cannabis. Además, hacen uso de todo tipo de útiles; desde reflectores, transformadores, cuadros eléctricos, balastros y sistemas de riego, hasta aires acondicionados, ventiladores, filtros de carbono y anti-olores, lámparas o circuitos de ventilación (en esta operación la instalación intervenida tiene una valor aproximado de unos 60.000 euros).