Agentes de la Policía Nacional han detenido en Valencia a un hombre de 24 años y dos mujeres de 23 y 26 años, de origen español, como presuntos autores de un delito contra la salud pública, además tanto al varón como a una de las mujeres se le imputan delitos de malos tratos. Se ha intervenido un cuchillo de 13 centímetros de hoja, 855 gramos de hachís, 75 de marihuana, 628 euros en billetes fraccionados y ocho teléfonos móviles entre otros efectos.
Los hechos ocurrieron sobre las ocho de la mañana del sábado, cuando los agentes pertenecientes a la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana que realizaban labores de prevención fueron alertados por la Sala del 091 para que se dirigieran a un domicilio situado en el distrito valenciano de Abastos, donde al parecer una mujer habría sido agredida por su hermano el cual esgrimía un cuchillo.
Inmediatamente los agentes se desplazaron hasta el lugar, escuchando a su llegada fuertes gritos de mujer, accediendo sin dilación al edificio, encontrándose en las escaleras a un hombre ensangrentado y en un gran estado de nerviosismo, la puerta de la vivienda abierta y una mujer en la entrada manchada de sangre gritando y sollozando.
Así mismo, los policías observaron cómo había rastros de sangre en suelo y paredes, localizando a otra mujer dentro del domicilio también en estado de agitación, ante lo cual, solicitaron inmediatamente asistencia sanitaria mientras trataban de tranquilizar a todos para poder recabar la información de lo sucedido.
Los agentes averiguaron que al parecer el hombre y una de las mujeres eran hermanos y habrían comenzado una acalorada discusión a causa de la presencia de la pareja del varón en el domicilio, llegando a agredirse mutuamente, y golpeando este último también a su pareja cuando intentó mediar y separarlos. Así mismo, al parecer, el hombre se habría autolesionado cortándose con un cuchillo en una mano.
Tras una serie de comprobaciones, los agentes detuvieron a ambos hermanos por malos tratos en el ámbito familiar e intervinieron un cuchillo de 13 centímetros de hoja partido por la mitad. Además, mientras los agentes recababan información se percataron de la presencia en el domicilio, de lo que podrían ser sustancias estupefacientes, concretamente marihuana y hachís, por lo que además se les detuvo a todos por un delito contra la salud pública, quedando el inmueble custodiado por una patrulla policial.
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Ante tales hallazgos, agentes de la Brigada Provincial de Policía Judicial, previa autorización judicial, procedieron a practicar un registro de la vivienda con la colaboración de la Unidad de Guías Caninos, interviniendo en el mismo 10 tabletas y cinco bellotas de hachís con un peso total de 855 gramos, 75 gramos en cogollos y hojas de marihuana, botes para el crecimiento y cultivo de marihuana, 628 euros en billetes fraccionados, ocho teléfonos móviles, tres balanzas de precisión, cuatro picadoras de marihuana, un aparato de envasado al vacío, así como elementos para el cultivo de marihuana.
De los detenidos, dos de ellos, con antecedentes policiales, han pasado a disposición judicial, mientras la otra arrestada ha quedado en libertad tras tomarle declaración, no sin antes ser advertida de la obligación de comparecer cuando fuera requerido para ello.
