Hemos entrado en 2022 con los países de Europa y Asia central aún bajo una intensa presión por el COVID-19. La variante Omicron representa un nuevo maremoto de oeste a este que se extiende por toda la Región además del aumento de Delta que todos los países estaban manejando hasta fines de 2021.
Según informa la Organización Mundial de la Salud (OMS) en un comunicado, la región registró más de 7 millones de casos nuevos de COVID-19 en la primera semana de 2022, más del doble en un período de 2 semanas. Las cifras continúan creciendo exponencialmente y a 10 de enero, 26 países informan que más del 1% de su población contrae COVID-19 cada semana.
“A este ritmo, el Institute for Health Metrics and Evaluation (IHME) prevé que más del 50 % de la población de la Región se infectará con Omicron en las próximas 6 a 8 semanas”, advierte la OMS
A pesar de esta aceleración de contagios, las tasas de mortalidad se mantienen estables y continúan siendo más altas en países con una alta incidencia de COVID-19, combinadas con una menor aceptación de la vacunación.
Cincuenta de los 53 países de Europa y Asia central ya han notificado casos de Omicron. Una variante que se está convirtiendo rápidamente dominante en Europa occidental y ahora se está extendiendo en los Balcanes.
Los datos recopilados en las últimas semanas por la OMS confirman que Omicron es altamente transmisible, porque las mutaciones que tiene le permiten adherirse a las células humanas más fácilmente y puede infectar incluso a quienes han sido infectados o vacunados previamente.
Respecto a la campaña de vacunación, la OMS reitera que las vacunas actualmente aprobadas continúan brindando una buena protección contra enfermedades graves y la muerte, incluso para Omicron.
“Debido a la escalada de transmisión sin precedentes, ahora estamos viendo un aumento de las hospitalizaciones por COVID-19. Es un desafío para los sistemas de salud y la prestación de servicios en muchos países donde Omicron se ha extendido a gran velocidad y amenaza con abrumar a muchos más”, afirman en un comunicado.
Uso continuado de mascarillas de “alta calidad”
Omicron se extiende más rápido que cualquier variante de SARS-CoV-2 que hayamos visto anteriormente. Por lo tanto, la OMS insta a los países a exigir el uso de máscaras de alta calidad en entornos cerrados e interiores, y garantizar que las personas vulnerables tengan acceso a ellas; “que las personas reciban apoyo para obtener su serie completa de vacunas y dosis de refuerzo tan pronto como esté disponible, asegurándose de que los trabajadores de la salud y otros trabajadores esenciales tengan acceso temprano a las dosis de refuerzo para mantener los servicios en funcionamiento”.