Después de algunos meses de reflexión, por muchas y muy diferentes circunstancias, he vuelto a la vida, a escribir, mal o bien, pero en todo caso a escribir, eso sí, siempre con valentía, defendiendo la libertad, la democracia y la dignidad humana.
El ejercicio de la democracia hoy en día ya no existe, es una quimera. Existen unos vividores que viven de lo ajeno, valga la redundancia. Dicen defender el ecosistema, antes llamada naturaleza y se la cargan. Viajan en falcon y parlotean defender el medio ambiente. Más aún, Sánchez ha acudido a una cumbre del llamado cambio climático a Bakú (Azerbayán), a la que no ha ido ni un solo líder de relieve internacional, llámense Biden, Xi Jinping, Putin, Macrón, etc., pero él todopoderoso como no tiene ni medio pelo ha querido estar para dar su discursito, mientras en España se saltaba la sesión de control al gobierno con una Valencia aterrada y desamparada. Se fue en un avión comercial con toda su prole, ahora bien, también se llevó el falcon vacío por si luego fuera menester utilizarlo. Estos son los que dicen proteger el medio ambiente. En fin, se cagan literalmente en nuestra propia cara. Son los mismos, unos y otros, que dejan tirado a un pueblo en las cunetas y no lo socorren. Son los políticos sin pelo que dicen dirigirnos, no sé si al abismo.
Los ciudadanos de a pie, incluidos militares, policías, guardias civiles, bomberos, miembros de protección civil y todo tipo de voluntarios, son los auténticos héroes, que una vez más han dado la cara por sus compatriotas ahora valencianos para salvarles la vida en unos casos y en otros sus escasas pertenencias. Los valencianos han sido víctimas de la incompetencia de los políticos que no han sabido manejar una nueva Gota Fría, como siempre se le ha llamado, aunque ahora por interés de los ecologistas y teledirigidos se le llame Dana. Los políticos al mando hicieron caso omiso a las advertencias de los expertos que aconsejaron por activa y por pasiva la limpieza de los barrancos llenos desde hace años de maleza, cañas, arbustos y todo tipo de escombros, pero claro está los ecologistas están en contra de esta práctica, prefieren que la naturaleza fluya a su antojo y las consecuencias, especialmente con el Barranco del Poyo a la cabeza, han sido más que trágicas causando la mayor parte de los fallecidos y la destrucción de todo tipo de bienes. Por cierto, dicho barranco depende de la Confederación Hidrográfica del Jucar que a su vez pende del Ministerio de Transición Ecológica, con Teresa Ribera al mando, que hizo mutis por el foro a sus obligaciones e incluso paró en 2021 su drenaje y limpieza, una irresponsabilidad monumental, que después de más de quince días de la tragedia ni tan siquiera ha dado explicaciones en el Congreso sobre su gestión, desde luego nefasta, y ahora se presenta en el Parlamento Europeo para su nombramiento como comisaria, aunque de momento le ha salido el tiro por la culata.
Suma y sigue, si no fuera poco, mientras Valencia sufría una de sus mayores tragedias humanas y materiales, una auténtica catástrofe, en el BOE se publicaba un Real Decreto por procedimiento de urgencia para la renovación del Consejo General de RTVE, que fue tramitado y votado en plena emergencia valenciana. Aún más, el Gobierno en el Real Decreto de ayudas por la Dana ha introducido una modificación por la que amplía la edad de jubilación del Director General Operativo de la Policía, una auténtica arbitrariedad, además de un insulto a las víctimas.
Esto es lo que nos ha dejado la pseudodemocracia. La tiranía de unos pocos que anulan la libertad y derechos de los demás. Habrá un día que este putiferio político tenga que salir de una u otra manera, de pie, de rodillas, por delante o por detrás. Es la mierda que contamina la vida y la que deniega la salvación de los indefensos seres humanos. La que omite el deber de socorro a un pueblo valenciano que sigue clamando por las ayudas. Nos encontramos en un auténtico submundo gobernado por inútiles y autoritarios. Una sociedad democrática ha de ser ante todo decente para ser creíble. Ya es hora de que se presenten las correspondientes querellas criminales contra el Presidente del Gobierno de España, Sánchez, y el Presidente del Gobierno de la Comunidad Valenciana, Mazón, aunque de eso ya hablaremos otro día.
MANUEL NOVÁS CAAMAÑO
Abogado