Se trata de un algo de necesaria reflexión y no es por el hecho en sí, si no por la importancia que se le ha dado. Un efectivo del GEO -la élite policial a nivel mundial-, “quiso ser creativo” en el acto del 200 aniversario de la Policía Nacional ayer, miércoles 8 de mayo.
El Palacio Real tuvo el privilegio de albergar la celebración del 200 cumpleaños de la mejor policía del mundo, a pesar de la opinión y odio irracional y desmedido de algunos. Policías uniformados de diferentes épocas desfilaron frente a los presentes recordando viejos tiempos, al igual que vehículos actuales de intervención de diferentes unidades.
Pero en este país, expertos en apuntar al fallo ajeno y reírnos con mal gusto éste, se prefirió destacar la toma de un policía experto en su trabajo, que “no fue impecable”, antes que hablar de los grandes policías que nos protegen cada día. Porque, ¿para qué vamos a ensalzar su labor haciendo análisis de nuestros operativos? ¡Que somos españoles hombre! Tenemos lo mejor a nivel internacional, pero vamos a reírnos de un riguroso profesional que, debido al terreno irregular -por que la superficie es de adoquines-, tropezó en la toma después de saltar en paracaídas.
No son pocos los usuarios que, haciendo uso de la razón, han restado la importancia que le dieron algunos medios de comunicación al hecho insignificante. Porque en España se habla antes de una mala toma en un evento, que de una violación grupal en cualquier otra parte del mundo, porque ha pasado, adivinen quiénes son en estos casos los responsables. Evidentemente, no todos los medios trabajan igual, sin embargo, sigo esperando a uno que admire la labor de ese efectivo frente a hecho absurdo de tropezarse en una toma.
Miren, ese policía, probablemente, habrá mirado a la muerte a los ojos y le habrá sonreído mientras apuntaba con su reglamentaria sabiendo que podía ser su último aliento. Ese hombre habrá salvado más vidas de las que jamás salvará cualquiera de nosotros en nuestra vida. Ese sujeto pasó unas pruebas imposibles, como pudimos ver en ‘GEO: Más allá del límite’ de Prime Vídeo. Ese agente, es leyenda, es un héroe y merece el respeto y admiración de todos.
El rey Felipe VI, orgulloso de la policía de su país -seguro-, torció el gesto preocupándose por el estado del policía, que ni se inmutó, oigan. Es el GEO; cayó y se levantó, no hay dolor. Porque no hay dolor, ellos están hechos de otra pasta, mentalmente están en otra división, son el Real Madrid de la policía.
Si llega usted a leerme, sí, el que ayer llevó con orgullo la bandera de la Policía Nacional dibujando en el cielo de Madrid una línea de historia eterna y tomó tierra impecablemente, teniendo en cuenta la irregularidad del terreno, déjeme decirle que es usted referencia. Y lo sé, como usted tiene mentalidad de ganador y guerrero incansable, no estará satisfecho, pero yo sí lo estoy. Mucho, además. Si el año que viene hubiese otra celebración, y dependiese de mí, sería usted quien llevase la bandera, sólo faltaba.
Porque yo sé cuál es su trabajo y valoro las locuras a las que se enfrentan llegado el momento, a gentuza de la peor calaña a la que dan puerta. Además, saben despachar rápido a la escoria terrorista que golpea a Europa de vez en cuando. De hecho, lo hacen con arte, porque el GEO es un grupo de artistas armados. Ya lo decía mi admirado Inspector Pelayo: “Esto es como un baile”.
Son los mejores en lo suyo, como si hubiese dado una voltereta y saltado tras la toma, magnífico también. Pocos aplausos se llevaron él y el compañero, otro héroe. Y, respecto a los detractores y demás personal que se dedica a criticar, espabilen, que es lamentable. Ya me gustaría ver a esos operativos de teclado y sofá con tantos saltos en su haber y con conocimiento en intervenciones imposibles, verles en una. A ver si se tapan las vergüenzas.
En fin, esta es la historia -que han querido destacar los medios y muchos usuarios, desgraciadamente- de un GEO lapidado frente al rey