En el marco de la operación MERCHAL el Equipo@Milladoiro de la Guardia Civil de prevención y respuesta en materia de Ciberdelincuencia, investigó a 4 personas por pertenencia a grupo criminal y por varios delitos de extorsión a un vecino de Ames que solicitaba servicios de prostitución a través de Internet.
La mencionada operación se inició a principio de año, cuando un vecino de Ames acudió a dependencias oficiales de la Guardia Civil denunciando que estaba siendo amenazado y extorsionado, recibiendo llamadas y mensajes en su teléfono móvil. Por temor a que esas amenazas se cumpliesen había realizado diversos pagos por valor de 4900€.
La victima manifestó que busco varios servicios de carácter sexual por Internet, pasados unos días recibió en su teléfono móvil un mensaje donde le indicaban que había estado hablando con mujeres de compañía, le había hecho perder el tiempo al no acudir a la cita y que no iban a tolerar esa falta de respeto. Por lo que le pedían que abonara la cantidad de 5000€, de no hacerlo se presentarían en su domicilio y lugar de trabajo, amenazándolo con pegarle una paliza y destrozarle la vida.
El Equipo@Milladoiro inició una investigación para constatar la veracidad de los hechos e identificar al autor o autores de los hechos, procediendo a la localización e investigación de cuatro personas. Dos de ellas residentes en Valencia y las otras dos en Zaragoza, todos ellos con múltiples antecedentes policiales por hechos similares.
Los investigados cometían el conocido “Timo del Sicario” amenazando y exigiendo dinero a cambio de no enviar a un sicario a los domicilios de las victimas que solicitaban servicios sexuales a través de Internet.
El modus operandi consiste en la publicación de falsos anuncios en páginas de contactos en las que se publicitan todo tipo de servicios de carácter sexual, recabando el teléfono de aquellas personas que han llegado a realizar alguna llamada interesándose en los servicios ofertados. A los pocos días los ciberdelincuentes, llaman y envían mensajes de teléfono a sus víctimas, amenazando por no haber acudido a un encuentro, o haberles hecho perder el tiempo.
Las diligencias instruidas por estos hechos fueron remitidas al Juzgado de Guardia de Santiago de Compostela.