La Guardia Civil de Alicante ha investigado a 17 personas, como presuntos responsables de 12 robos de algarroba, cometidos en diferentes localidades de la Marina Alta y Marina Baixa alicantina.
Los agentes iniciaron las investigaciones al detectar un incremento de las sustracciones de este producto. Se trata de varios grupos, no vinculados entre sí, conformados por dos o tres personas cada uno, procedentes en su mayoría de la localidad de Alicante.
Durante los dos últimos meses la Guardia Civil detectó un incremento de robo de algarroba, en explotaciones agrícolas de las Comarcas de la Marina Alta y Baixa, especialmente en las localidades de Altea, Benigembla, Gata de Gorgos y Jalón.
El Equipo especializado contra Robos en el Campo (ROCA) de la Compañía de la Guardia Civil de Calpe inició las averiguaciones tendentes a esclarecer los hechos, que estaban generando gran desazón entre los agricultores, temerosos de perder la producción de la temporada.
La mayoría de los delitos se cometían al mediodía, coincidiendo con las horas de más calor, en las que no suele haber personal trabajando en las fincas porque paran para comer y descansar. Los ladrones recolectaban la algarroba directamente desde los árboles y la cargaban en vehículos para llevársela. Si encontraban en la zona preparados los sacos, ya recolectados por los propios agricultores, los cargaban sin dudar.
A lo largo de la investigación, los agentes comprobaron que se trataba de varios grupos de delincuentes, sin vinculación entre sí, cada uno compuesto por dos o tres personas, que utilizaban vehículos tipo camión, que admitían cargas pesadas y voluminosas, en ocasiones
incluso de alquiler.
Han sido investigadas 17 personas con edades comprendidas entre 15 y 55 años, de nacionalidades española, marroquí y rumana, procedentes en su mayoría de la capital de la provincia. Se les atribuyen 12 delitos de sustracción de algarroba. Las diligencias han sido puestas a disposición de los Juzgados de Instrucción de Benidorm y de Denia, y de la Fiscalía de Menores de Alicante.
Las algarrobas sustraídas eran vendidas posteriormente en el mercado negro. Los agentes han localizado dos almacenes en Altea y Sella que pueden haber estado receptando parte de este producto. La Guardia Civil, con la colaboración del Departamento de Salud Pública de la Marina Baixa, ha inspeccionado estos almacenes, en los que se ha detectado un total de 23 toneladas de fruto adquirido de forma irregular, no pudiendo acreditarse por los responsables su trazabilidad, y por la tanto, el origen legal.
Además sendos almacenes presentaban deficiencias graves de carácter sanitario. Los almacenes han sido denunciados por diversas infracciones a la normativa que regula la Seguridad Alimentaria. Han sido inmovilizadas 23 toneladas de algarroba.
Las sustracciones sufridas han generado entre los agricultores significativas pérdidas. La algarroba se ha convertido en un fruto objetivo de robos debido al precio que tiene actualmente en el mercado. 300 kilogramos de algarroba han sido recuperados durante las actuaciones y ya han sido entregados a sus legítimos propietarios.
En el marco de la Orden de Servicio contra las sustracciones en explotaciones agrícolas y ganaderas, desde su creación, los Equipos ROCA de la Guardia Civil mantienen una relación continua con los agricultores y asociaciones agrícolas, clave del éxito en la persecución de los delitos que sufre este sector.