Acaba de salir publicado el balance de criminalidad en España, correspondiente al primer semestre de 2022. Este arqueo, cocinado por el Ministerio del Interior en su cueva de la Dirección General de Coordinación y Estudios, es un nuevo insulto a la inteligencia.
Obscenidad
La obscenidad del Sistema Estadístico de Criminalidad del palacete de Castellana llega al punto de rubricar que la delincuencia ha bajado 0,16 décimas con respecto a 2019. ¡No se lo crean! Les están mintiendo descaradamente. Ni siquiera manoseando la estadística logran ser factibles. La realidad es bien distinta. Todos los delitos, sin excepción, han crecido, menos los secuestros. Pueden comprobarlo en el estudio-libelo que la Administración no ha tenido más remedio que publicar en la web del ministerio.
En otras palabras, la criminalidad arrasa. En el primer semestre de 2021 constan “oficialmente” 897.048 infracciones penales. En el mismo periodo de 2022 figuran 1.127.147. Es decir, un 25,7 por ciento más, sin contar las cifras que Interior oculta con la cosmética y el afeitado. Es indudable que el actual modelo de seguridad necesita un cambio radical.
Robos, asesinatos, violaciones
De tal modo, y pese al afán diario de los agentes, los homicidios dolosos y asesinatos consumados, incluidos los considerados en grado de tentativa se han disparado un 28,3 por ciento. Por lo que respecta a la suma de ataques de diversa tipología de índole sexual (indemnidad, libertad y/o agresión con penetración) se acreditaron, agrupando todos estos conceptos, 18.778 casos, lo que supone un incremento total del 63,9, teniendo en cuenta además que un buen número de estas fechorías no se denuncian. Si nos fijamos en los delitos de lesiones, la subida es del 48,2. En cuanto a los robos con fuerza en domicilios se han elevado hasta un 22,6. Los robos con violencia e intimidación rozan el 33 por ciento. Los hurtos un 44,6. El narcotráfico sigue imparable… Y así todos y cada uno de los tipos delictivos afectados del Código Penal, excepto los secuestros. La ley de Murphy en estado latente… y empeorando.
Tengan cuidado ahí fuera; en el Ministerio del Interior siguen sin cobertura.
No es de extrañar que os quieran callar. Animo y seguid con vuestro trabajo, la inmensa mayoria de la gente, esta con vosotros