Ya están fuera de la isla, así lo ha acordado el juez, el problema es que han quedado en libertad. Se trata de dos hombres y una mujer, todos ellos de origen peruano, presuntos autores de 25 hurtos de teléfonos móviles, así como numerosos delitos de estafa llevadas a cabo al acceder a los terminales de las víctimas cambiando las contraseñas y vaciando las cuentas u obteniendo préstamos.
Operaban en autobuses urbanos de la isla de Palma. Han sido detenidos por la Policía Nacional y Policía Local de Palma. Sus principales objetivos eran ancianos y su “lugar de trabajo” los autobuses urbanos y estaciones.
El grupo criminal era de naturaleza itinerante, cuyos componentes operan por equipos de 3 a 4 personas con estancias reducidas en la Isla y que se dedican al hurto continuado en líneas de autobuses, principalmente de teléfonos móviles que posteriormente utilizaban para cometer estafas. Los investigados accedían a las cuentas bancarias de las víctimas, en su mayoría personas de edad avanzada ocasionando un grave perjuicio económico, dejando cuentas vacías o llegando incluso a rechazar recibos ya pagados para conseguir más dinero e incluso solicitaban préstamos.
os peruanos detenidos son responsables de alrededor de 60 hurtos en los últimos seis meses, consiguiendo extraer dinero por importe de 50.000 euros. Según cita el diario Última Hora.