El resumen de la versión de los hechos juzgados por segunda vez y ocurridos el día 8 de diciembre de 2017 en el conocido crimen de los tirantes, para las acusaciones es claro:
Sr Laínez murió en el Hospital Clínico de Zaragoza cuatro días después de haber recibido una brutal y alevosa paliza por parte del acusado Rodrigo Lanza, que originó su paro cerebral y posterior muerte
La fiscal ha llegado a manifestar que el acusado ha cometido un asesinado mediante un ataque a traición, con alevosía y por motivos ideológicos.
Según sus versiones, Lanza entro en el Bar tocadiscos la citada fecha, en compañía de tres amigos y allí se encontró a Victorio Laínez, sentado en la barra, solo y sin meterse con nadie.
Fue Lanza quien se aproximó a Laínez e insultó, se produjo un enfrentamiento verbal entre ambos.
A partir de ahí, el enfrentamiento siguió en la calle, donde Lanza ataca por la espalada de forma alevosa y acaba con la vida de Laínez a golpes y patadas en la cabeza, cuando este se encontraba en el suelo.
El informe forense es evidente, la muerte se produjo por numerosos golpes en la cabeza que llegaron a desfigurar la cara del fallecido.
Por su parte la defensa de Lanza argumenta que en un momento dado el agredido esgrimió un arma blanca y provocó la situación y la respuesta del hoy juzgado. Ese arma nunca fue encontrada ni corroborada por testigos.
La sentencia no tardaremos en conocerla.
