La investigación de un incendio es difícil y muy compleja. El incendio originado esta tarde en una vivienda del cuarto piso de un edificio situado entre la avenida de Maestro Rodrigo y la calle Poeta Rafael Alberti, en el barrio del Campanar, Valencia, ha provocado que las autoridades locales, en colaboración con los servicios de emergencias y la Unidad Militar de Emergencias (UME), hayan desalojado el edificio y las zonas aledañas con el fin de evitar que los civiles se pusiesen en peligro. Ese es el objetivo de la primera intervención, salvar vidas.
Una vez realizada la misma y sofocado el incendio, se estabiliza/protege el lugar para que puedan trabajar los especialistas de la investigación.
El primer informe pericial lo realizan los propios bomberos; informan de las dotaciones, los medios, las personas salvadas, inciden poco en las causas, describen el fuego, la ruta del incendio, el tiempo atmosférico, en este caso parece que existía mucho viento, los olores percibidos y los materiales. Entran muy poco en la investigación.
El segundo informe pericial lo realiza Policía Científica, en este caso de la Policía Nacional. Se describe la fecha, hora y lugar del fuego, el origen del mismo, se intenta determinar la causa y el causante, las circunstancias. Se recogen indicios como posibles acelerantes, estudio de cableado, deformación de materiales, efectos de la carbonización… se realizan fotos y vídeos.
Por último la investigación de Policía Judicial también forma parte del atestado; los testigos, el año de construcción del edificio, informes de riesgos, seguros, permisos, licencias… aún es pronto para tener una hipótesis clara