Los Mossos piensan darse de baja el 21 D, con motivo del bloqueo de Cataluña por los CDR.
El 21 de diciembre se celebrará una reunión del Consejo de Ministros en Cataluña, a la que acudirá el presidente Pedro Sánchez.
Con motivo de esta visita, los independentistas radicales han convocado huelgas, concentraciones, ataques a infraestructuras y sabotajes.
Los Mossos es una de las Policías más politizadas.
Su fin es colapsar el país con estas medidas, lo que a buen seguro, derivará en una jornada de gran inseguridad en toda la ciudadanía catalana.
Por si fuera poco, los Mossos planean una baja médica masiva ese día, lo que han denominado, “la gripe azul”.
Las últimas declaraciones de Quim Torra y del conseller de Interior, Miquel Buch, en las que han criticado la actuación de los Mossos del día 6 de diciembre, han sido la gota que ha colmado el vaso.
Se sienten abandonados por sus superiores, los cuales llegaron a decir que la actuación de los Mossos ese día fue la de una policía antidemocrática.
Los Mossos no han convocado la huelga de manera formal, al no tener las FCS reconocido el derecho a huelga. No obstante, abre la posibilidad de llevar a cabo una huelga encubierta, donde la mayoría de agentes se pusieran enfermos el 21D.
Esta circunstancias reducirían, el ya escaso número de efectivos de Mossos, pudiéndose ver comprometida la seguridad en una jornada que se prevé muy conflictiva.
A su vez, los Mossos sufren un déficit de 3.000 agentes, un hándicap que pudiera ser determinante a la hora de intentar controlar la jornada de huelga y ataques vandálicos que se vaticinan.
Esto nos lleva a formularnos una pregunta: ¿Movilizarán nuevamente a Policía Nacional y Guardia Civil para garantizar la seguridad en Cataluña?