En primer lugar, recuerdo que la Secretaría de Estado de Seguridad, como es habitual por estas fechas, ha dictado una “instrucción para vigilar y proteger con especial intensidad lugares y espacios, medios de transporte, acontecimientos religiosos, de ocio o lúdicos en general en los que esté prevista gran afluencia de personas”
En segundo lugar, como continuación a mi anterior publicación de Multiplicadores en autoprotección ante amenazas activas, aglomeraciones y eventos en tiempos de pandemia, donde recordaba a modo de resumen en el ámbito preventivo, el Plan de Prevención y Protección Antiterrorista, numerosos incidentes intencionados (destacando por ello la importancia de ALERTCOPS, como aplicación gratuita para smartphones de avisos para la ciudadanía ante situaciones de riesgo), diferentes campañas informativas sobre instrucciones y recomendaciones en materia de autoprotección y actuación a seguir por parte de la población en general, para el personal de Seguridad Privada y para los integrantes de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, que pueden convertirse en sujeto activo y primer respondiente en el momento de un accidente, incidente, amenaza o emergencia.
Por ello recordaba también la importancia de la implantación (formación previa teórica y práctica), integración y coordinación real y efectiva de los diferentes Planes de Autoprotección, Seguridad y/o Emergencias, entre los diferentes servicios posibles implicados; así como realización y evaluación de simulacros, que podría reducir el riesgo generado por la propia situación de emergencia sanitaria sobrevenida, aumentando la efectividad y reduciendo los tiempos de reacción, mitigando posibles riesgos derivados de la improvisación frente a la proactividad. “SE JUEGA COMO SE ENTRENA”.
Medios
Destacaba de otro lado, que durante años en varios artículos y jornadas, he recalcado que las mejoras, innovaciones y buenas prácticas en materia de seguridad, formación y autoprotección, no deberían ser tales, sino que deberían ser obligatorias en cada caso de aplicación específica por regulación homogeneizada a nivel nacional; destacando por ejemplo, mejoras y novedades que llevaron a Madrid, a ser una ciudad pionera en medidas preventivas y buenas prácticas en la seguridad de grandes eventos y a los espacios municipales del Ayuntamiento de Madrid a ser un referente a nivel nacional en materia de seguridad y autoprotección durante mi gestión pública como Director de Seguridad y Emergencias en el área de Cultura, Turismo y Deportes, dotando a todos los espacios y eventos municipales gestionados, de equipos de respiración autónoma y numerosos desfibriladores DESA con soporte gráfico (incluso en escenarios y carrozas de Cabalgata), maletines con bombonas de oxígeno y balones de apoyo respiratorio, y por supuesto, de botiquines de control de hemorragias severas ante posibles “amenazas externas activas intencionadas”, impartiendo numerosas jornadas formativas (entre otras tantas) sobre Primer Respondiente, Primer Interviniente, Control de Hemorragias (Stop The Bleed)…., consiguiendo hacer multiplicadores por doquier; cuya línea se debería continuar.
Obligatoriedad
Igualmente publiqué, que no solo algunas de estas innovaciones, buenas prácticas y recomendaciones, deberían convertirse en obligatorias para los miembros de las diferentes Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, sino que, se deberían reglar también obligatorias para el sector de los eventos (y para todos los sectores posibles) desde las Administraciones Públicas, como nuevas medidas preventivas y formativas que deberían ser implantadas para prevenir otros riesgos diferentes a los habitualmente contemplados en los análisis de riesgos de infinidad de Planes de Autoprotección.
Recalcaba que esperaba que estas líneas publicadas sirviesen para recordar que no debíamos dejar de seguir formando y ser formados, reciclar y actualizar conocimientos, y ante todo, concienciar y multiplicar necesidades formativas y dotación de material para multiplicar personal y espacios hemocardioprotegidos (recordemos que seguimos en NAA4), protocolos más proactivos de coordinación y comunicación ante emergencias, visitas preventivas de conocimiento del entorno y documentos para la intervención, instrucciones de interlocución y coordinación, propuestas formativas en otros espacios, protocolos de solicitud de apoyo exterior, propuestas sobre dispositivos sanitarios para eventos por perfiles de riesgo previsible, propuestas de planes especiales por masa crítica y de uso de edificios públicos (sobre todo) y privados para entrenamientos, innovaciones sobre señalización y sistemas de comunicación preventivos y ante emergencias, etc.
Aprobada por unanimidad
Pues bien, tengo el gran honor de informaros que lejos de olvidar mis propias líneas y demandas, trasladé la siguiente proposición como especialista en seguridad (que os animo a proponer en vuestros respectivos ámbitos competenciales y/o territoriales), al grupo de electores de Recupera Madrid con especialistas y profesionales, siendo registrada para su votación en el Pleno del Ayuntamiento de Madrid, y aprobada por unanimidad:
Punto 33. Proposición n.º 2022/8001801:
Que el Ayuntamiento de Madrid:
- Actualice y, en su caso, amplie de oficio la formación de “Programa Alertante”, Primer Respondiente” y bomberos “te informa” (campaña preventiva y formativa) dirigida a personas trabajadoras operativas y administrativas que no estén formadas o actualizadas, de servicios públicos municipales se seguridad y emergencias, extensible a personas trabajadoras del cuerpo de agentes de movilidad, agentes de parque, EMT, empresas municipales, organismos autónomos y de espacios y edificios municipales (polideportivos, bibliotecas, juntas municipales de distrito, oficinas de atención ciudadana, etc.), destacando la importancia de la formación teórica y práctica de prevención y protección contra incendios, primeros auxilios, uso y manejo de desfibriladores, técnicas de reanimación cardiopulmonar y control de hemorragias masivas para actuar como primeros respondientes y/o intervinientes ante situaciones sobrevenidas y zonas de respuesta de intervención.
- Incremente de oficio la instalación de desfibriladores para garantizar un tiempo de respuesta que no supere los tres minutos e implemente la dotación de botiquines de control de hemorragias masivas, mantas ignífugas (y otros medios de respuesta e intervención inmediata) en dependencias y vehículos de servicios públicos de seguridad y emergencias, extensible a agentes de movilidad, agentes de parque, EMT; espacos y edificios municipales ( polideportivos, juntas municipales de distrito, oficinas de atención ciudadana, etc).
No perdamos tiempo, sigamos haciendo multiplicadores y no caigamos ni dejemos caer en el olvido al resto de los que nos rodean en estas líneas de “vital importancia”.