El asesino de la niña Erika Yunga en Oviedo, el moldavo Igor Postolache, ha sido hallado muerto este miércoles en su celda de la prisión de Villahierro,
El preso Postolache se encontraba en la cárcel cumpliendo la condena por agredir sexualmente a una niña de 14 años y matarla a puñaladas el pasado abril de 2022 en Vallobín (Oviedo).
En abril de este año aceptó la petición de la Fiscalía y de la acusación de prision permanente revisable por el asesinato de la menor, y una pena de doce años y seis meses por la agresión sexual.
Llevaba en prisión más de un año desde que cometió el asesinato. Estudió los horarios y movimientos de la niña y el 5 de abril, cuando ella volvía del instituto, la esperó en el portal, la apuñaló, la llevó a su casa y allí la mató y la agredió sexualmente. En abril de este año, reconoció los hechos y aceptó la pena de prisión permanente revisable.