Tu Abandono Me Puede Matar –TAMPM– y la Asociación Profesional de Funcionarios de Prisiones –APFP– denuncian una nueva y grave agresión a un funcionario de prisiones en el Centro Penitenciario de Madrid VI en Aranjuez.
Un altercado que se produjo este lunes durante el cierre de celdas en uno de los módulos más conflictivos del centro, momento en el que un interno que se negaba entrar en la celda agrede al funcionario de servicio, propinándole varios puñetazos a un funcionario de prisiones que le ocasionan lesiones en pómulo, ojo y oído.
Eran las 20.15, cuando se estaba realizando el cierre de celdas en el módulo 7 del Centro Penitenciario de Aranjuez, y un interno se queda fuera de la celda, retardando el cierre de celdas del módulo y alterando el orden regimental, por lo que el funcionario de servicio en el departamento le recrimina su acción, a lo que el interno le dice “aquí mandan los presos, no tú”.
Acto seguido, sin mediar palabra se lanza sobre el funcionario y le propina varios puñetazos en la cabeza dejándolo en estado semiinconsciente, gracias a la rápida intervención de otros funcionarios de servicio, el funcionario agredido es socorrido.
Tras personarse en el departamento el Jefe de Servicios, el interno que sigue en actitud desafiante y agresiva, vuelve a intentar golpear a los funcionarios, logrando tirar al suelo al Jefe de Servicios.
Tras un fuerte forcejeo y pese a la resistencia del interno, los funcionarios logran reducir al interno trasladándolo al departamento de aislamiento, pudiendo trasladar el funcionario agredido a los servicios médicos del Centro, donde es atendido de contusiones y lesiones en su nariz y en uno de sus brazos.
TAMPM destaca el hecho de que la acuciante falta de personal fue determinante en la causa y desarrollo posterior del altercado, volviendo a denunciar la nefasta gestión de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, que es responsable directa de estos altercados y que está generando en los centros un entorno de trabajo irrespirable que pone en serio peligro a los funcionarios, que ponen en juego su integridad física cada vez que van a trabajar.
APFP significa que lleva años solicitando que los funcionarios de Instituciones Penitenciarias tengan la consideración de agentes de la autoridad en el ejercicio de sus funciones, pues estos actos sólo implican sanciones regimentales, para que conlleve sanción penal tienen que llegar a ocasionar a los trabajadores lesiones graves, pero el daño a su integridad física, psíquica o a su vida ya se ha producido por parte del interno y en muchas ocasiones a los internos les sale “gratis” o una sanción que les acorta las horas de salida al patio.
A su vez APFP reclama al Ministerio del Interior un estatuto propio para los funcionarios de prisiones como marco normativo para su Institución; adecuación de los medios coercitivos al siglo XXI con la aprobación de pistolas Táser y un incremento de las plantillas para ajustarlas a las necesidades reales de los centros penitenciarios para minorar las agresiones que padecen los trabajadores penitenciarios, así como una actualización retributiva con la equiparación salarial con sus compañeros de Cataluña.