Este jueves se denunciaba la presencia de gusanos e insectos en la comida de la academia de la Guardia Civil en Jaén. Las imágenes sobre estos hechos eran publicadas en Twitter por el usuario RO-1(@Undercover_Camo) que difundió fotografías de varios platos con animales “cocinados”. Una comida por la que a los alumnos se les retrae de sus nóminas aproximadamente, unos 300 euros al mes.
Desde la academia han argumentado en declaraciones para Cuatro que los hechos se deben a un supuesto error con un paquete de garbanzos en mal estado insistiendo también que exigen los máximos controles a la empresa de catering para que esto no se vuelva a producir. Precisamente por ello, desde h50 nos hemos puesto en contacto con Elena González, experta en la gestión de la seguridad alimentaria, para evaluar qué ha podido ocurrir con este caso y si el argumento ofrecido tiene o no solidez respecto a los protocolos de manipulación de alimentos.
h50: ¿Cómo es posible que aparezcan insectos o gusanos en la comida emplatada de una academia que debe dar de comer a cientos de alumnos y que presumiblemente cuenta con unos protocolos de seguridad?
Elena González: La aparición de este tipo de plagas en alimentos almacenados (legumbres, harinas, cereales…) no es rara si no se tienen unos controles higiénicos adecuados. Son productos que se almacenan durante largos periodos de tiempo y que son muy atractivos para muchas especies de insectos porque les proporcionan alimento, refugio y unas condiciones de temperatura y humedad idóneas para su desarrollo.
Por lo que explican en la noticia, la empresa responsable de elaborar la comida había apartado un saco de garbanzos que estaba contaminado con insectos, pero un trabajador se equivocó y lo utilizó igualmente. Lo que más llama la atención de esta explicación es que se haya podido dar una equivocación así. Cuando se detecta un problema como este en un alimento, debe identificarse claramente (con un cartel, por ejemplo) como no apto para el consumo y almacenarse en una zona en la que sea imposible que se utilice por error, hasta que se elimine o se devuelva al proveedor. Es muy poco habitual que, teniendo un procedimiento correcto para la retirada de productos en mal estado, pueda ocurrir un error así.
h50: ¿Qué consecuencias puede acarrear para la salud de las personas que los alimentos estén contaminados por la presencia de este tipo de animales?
Elena González: No es lo más habitual, pero estos insectos pueden hospedar microorganismos patógenos que, si entran en el organismo de la persona que come los alimentos contaminados, pueden llegar a ocasionar daños más o menos serios. Si el alimento está correctamente cocinado, el problema se minimizaría, aunque sigue siendo inaceptable que te sirvan una comida en esas condiciones.
h50: ¿Qué medidas de seguridad alimentaria deben tener en cuenta las empresas de catering en este caso para garantizar la máxima higiene sobre los alimentos que procesan?
Elena González: Para evitar problemas de plagas en los alimentos, la empresa de catering debe tener unos proveedores de confianza (con su registro sanitario) y almacenar los productos correctamente en un lugar limpio y en buen estado, con la temperatura y humedad adecuadas. Además de, por supuesto, comprobar el producto antes de utilizarlo y de tener un sistema de retirada eficaz para que los alimentos que han visto que no son aptos para el consumo, se identifiquen y separen correctamente, evitando errores como el que menciona la empresa de catering.
Todo esto debe estar recogido en el Sistema de autocontrol de la seguridad alimentaria, que viene a ser el manual de instrucciones para evitar que los alimentos se conviertan en un peligro para las personas y que todas las empresas que manipulan alimentos están obligadas a tener (y a utilizar correctamente).
