Dos agentes de la Guardia Civil han arriesgado su vida para rescatar a dos personas que se encontraban atrapadas en interior de una vivienda incendiada en la zona de Las 200 viviendas de Roquetas de Mar, cuya entrada se encontraba “apuntalada” desde su interior con muebles y bloques de cemento.
Los hechos han ocurrido este miércoles cuando testigos presenciales advertían a una patrulla de la Guardia Civil que se había iniciado el fuego en la vivienda.
Los agentes se dirigieron al lugar notificando los hechos a su emisora central solicitando apoyo urgente de los servicios médicos y de bomberos.
Al llegar al edificio, los intervinientes comenzaron a desalojar a los residentes llamando puerta por puerta hasta llega a un piso de la tercera planta sin ascensor donde se había iniciado el foco del incendio. Los actuantes percibieron como personas desde el interior pedían auxilio. Sin embargo, la sorpresa de los agentes fue cuando al tratar de derribar la puerta se percataron que se encontraba apuntalada desde el interior con bloques de cemento y muebles.
Finalmente, lograron acceder al interior sorteando cantidades de escombros y muebles que bloqueaban el acceso hasta que localizaron en el suelo de salón a una persona boca abajo. La patrulla logró ponerla a salvo en el exterior sorteando la dificultad de que la puerta de acceso al domicilio ya estaba en llamas y una vez allí fue cuando les comunicó que en una de las habitaciones se encontraba otra persona.
Por tal motivo, sin dudar en el grave riesgo que suponía para sus vidas el avance de las llamas, los agentes regresaron a la vivienda desplazándose a ras de suelo para evitar la densa capa de humo y casi a ciegas localizaron a otra persona semiconsciente en una habitación. Los guardias civiles la lograron desplazar hasta el salón y portándola en brazos la evacuaron al exterior del edificio.
Los agentes regresaron al domicilio una tercera vez para cerciorarse de que no existían más víctimas en el interior de la vivienda.
Al lugar se desplazaron varias dotaciones médicas, que atendieron a las víctimas, teniendo que evacuar a una al centro de salud y a la otra al centro hospitalario debido a que revestía más gravedad.
Tras la actuación, y después de sofocar el incendio por parte de los bomberos, los agentes también requirieron de asistencia sanitaria debido a la cantidad de humo inhalado.