La policía es una familia tan extensa que sus miembros no conocen fronteras y a pesar de la lejanía física están unidos por la delgada línea azul. A lo largo de la geografía y por muy diferentes que parezcamos, quiénes elegimos una vida de entrega y vocación de servicio tenemos un mismo sentimiento de fraternidad.
El artículo de hoy es un reconocimiento a los policías de todo el mundo y en concreto a Claudio G. hermano de la Polizía di Stato italiana, con quien compartí una de las experiencias profesionales y humanas más especiales y enriquecedoras de mi carrera profesional.
Cómo miembro del Grupo Operativo de Respuesta del Distrito de Moncloa en Madrid, tuve la enorme suerte de participar en la cooperación policial internacional de la mano de un excelente profesional que con abrumadora humildad supo transmitirme sus impecables principios y valores. En aquel Zeta no se hicieron distinciones de escalas ni categorías, se trabajaba mano a mano. Diferente uniforme, distintos acentos, y una misma manera de entender la vida. Sin duda no se puede pedir más.
Fueron jornadas muy ilustrativas contando experiencias y batallitas. Cada uno había vivido las suyas y salvo alguna diferencia, ambos parecíamos hablar de lo mismo. La complicidad, el respeto y el afecto entre nosotros favoreció el surgimiento de una estrecha y fuerte amistad que aún perdura.
Han pasado los años y seguimos viéndonos y hablando de cómo la sociedad cambia, de la evolución de la delincuencia y de cómo los policías debemos actualizarnos para ser eficaces en una constante lucha. Es un placer escuchar a quien se forma para enseñar y aprende enseñando.
Sin duda habrá muchas historias parecidas a la nuestra y por ello quiero poner en valor a la sección de cooperación policial internacional de la Dirección general de la Policía. Proyectos tan enriquecedores y pedagógicos son fundamentales para el crecimiento personal de los profesionales que intervienen así como para la propia institución policial.
Haber compartido jornadas de patrulla con Claudio resultó tremendamente didáctico. Es muy necesario enfatizar en el acercamiento de nuestras posturas y planteamientos profesionales hacia el desempeño de nuestra labor policial, así como el intercambio de diferentes opiniones e impresiones sobre cuestiones relacionadas con nuestra actividad.
Todos estos proyectos refuerzan los lazos entre los diferentes cuerpos policiales y fomentan una mayor colaboración policial de aplicación directa. Todo lo que los profesionales de la seguridad podamos aprender y mejorar será beneficioso para nosotros mismos, para la institución y sobre todo para la ciudadanía a quien nos debemos.
Sirva este artículo como homenaje a quien lleva toda una vida de entrega y sacrificio por los demás.
Commissario Claudio G. Miembro de la Polizia di Stato desde 1985
Centro Polifunzionale-Scuola Tecnica di Roma Funcionario del Sector formación y instrucción. Instructor, profesor y tutor de Técnicas Operativas, Defensa Personal y del Grupo especial contra el Terrorismo (U.O.P.I.)
Sea en España o en Italia, SEMPER FIDELIS.