El delegado del Gobierno en el País Vasco, Jesús Loza, ha señalado que uno de sus objetivos es cambiar ese eslogan de “Alde hemendik” (Fuera de aquí) que se ha utilizado por parte de la ciudadanía vasca contra la Policía y la Guardia Civil por el de “que se queden”. “Vamos poco a poco ganando esa visibilidad, esa cercanía”, ha señalado durante la toma de posesión del nuevo jefe superior de Policía del País Vasco, José Moisés Pérez Cornejo, que sustituye en el cargo a José Antonio Santamaría, que se ha jubilado.
Loza ha reconocido no obstante que todavía hay que seguir avanzando en la visibilidad de la coordinación de los cuerpos policiales. “Todavía nos queda camino por recorrer”, ha considerado.
También el delegado del Gobierno ha recordado la labor policial en Euskadi contra ETA y el terrorismo callejero y ha recordado que el nuevo jefe superior “ha sufrido y luchado contra el terrorismo” durante muchos años.
Precisamente, el director general de la Policía Nacional, Francisco Pardo, ha asegurado que este cuerpo de seguridad seguirá estando en el País Vasco “para cumplir y hacer cumplir la ley como no podía ser de otra manera” y para hacerlo de la forma coordinada con la Guardia Civil, la Ertzaintza y las policías locales.
El director general de la Policía ha destacado la importancia que tiene la colaboración con la Ertzaintza y la cooperación internacional porque cuando se trabaja de forma coordinada siempre hay un grado de eficacia mayor sobre todo en un mundo globalizado en el que la seguridad y el delito no tienen fronteras.
Ha recordado que la Ertzaintza está integrada en el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) y participa en Interpol y Europol, y ha valorado la cooperación con la Policía Vasca en la reciente cumbre del G-7 que ha puesto en evidencia lo importante de la coordinación policial para servir mejor a los ciudadanos.
También Pardo ha rendido un homenaje a los 112 policías nacionales asesinados por ETA en el País Vasco, unos “héroes” que contribuyeron a la derrota de la banda terrorista. “Representan los cimientos y esa sangre que corre por las venas de la institución policial y que contribuye a hacernos más fuertes”, ha remarcado.
Afortunadamente, ha añadido, en Euskadi ahora la Policía Nacional abarca otros cometidos transcendentales como la lucha contra el crimen organizado, el narcotráfico, la seguridad de las fronteras, el ciberdelito o la trata de seres humanos.
Por su parte, el nuevo jefe superior de Policía en el País vasco, José Moisés Pérez Cornejo ha dejado claro en su intervención que la Policía Nacional “tiene que estar presente en esta sociedad porque es nuestra sociedad”. “Somos la Policía en el País Vasco, del País Vasco, no somos unas fuerzas de ocupación”, ha incidido.
Ha recordado que los policías han soportado durante años en Euskadi la presión terrorista y el “hostigamiento”. “ETA intentó sacarnos de esta sociedad, convertirnos en fuerzas de ocupación pero no lo han logrado y por tanto no podemos darles ahora esa ventaja una vez que han sido derrotados”, ha continuado.
Ha anunciado que uno de sus retos es el de cambiar la percepción en parte de la sociedad vasca de que la Policía Nacional es un obstáculo para la paz, la normalización y la convivencia, y ha abogado por un trabajo coordinado con la Ertzaintza, Guardia Civil y policías locales.
José Moises Pérez Cornejo llega al frente de la Policía Nacional en Euskadi tras una larga trayectoria en el cuerpo donde ingresó en 1982. Su primer destino fue precisamente en el País Vasco y tras pasar por la Comisaría General de Información en Madrid regresó a la Comisaría provincial de Bilbao como jefe de la Brigada Provincial de Información. En 2017 fue nombrado Jefe regional de Operaciones en esta comunidad.
Al acto de toma posesión han asistido, entre otras autoridades, el presidente del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, Juan Luis Ibarra, y el ararteko, Manuel Lezertua.
Antonio Abarca