Falta de empatía en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad

Desde el policía o guardia civil de seguridad de cualquier comisaría o puesto, pasando por el que tiene su puesto de trabajo en los radiopatrullas, o en la Oficina de Denuncias y Atención al Ciudadano (Odac), y terminando por los grupos de investigación, están toda su jornada laboral escuchando y viendo los problemas de la gente

Mentalmente esto puede generar estrés o cansancio mental pudiendo provocar trastornos físicos y mentales. Esto suele pasar sobre todo al principio de la carrera profesional de los agentes, en donde se tiende a empatizar mucho con las víctimas. Poco a poco, se va dejando de percibir, compartir o inferir en los sentimientos y emociones de los demás, no por falta de sensibilidad, sino para evitar el estrés que puede conllevar.

Finalmente se deja de empatizar salvo casos fuera de lo normal y eso puede dar sensación de falta de sensibilidad del agente ante el ciudadano, pero en realidad es una medida de autoprotección del agente.

Se dice que la policía vive los peores 20 minutos de la vida de los demás y esto a la larga puede afectar mucho a una persona si no está mentalmente preparado.

En una oficina de denuncias, un policía puede estar ocho horas escuchando problemas de personas de manera continua, por lo que, si no pone un filtro, podría afectarle seriamente.

Y es que básicamente ningún policía está libre de este problema.

Los radiopatrullas son los primeros en llegar cuando existe un problema, y es en ese momento cuando la gente se encuentra más alterada y fuera de sí. Gritos, llantos, rabia y dolor entre otros, es el recibimiento que tienen.

Robos violentos, agresiones, robos en domicilios, malos tratos, incendios, asesinatos, etcétera. Momentos de la vida que para muchas personas podrá convertirse en un trauma. En esos momentos el agente sin perder la compostura debe buscar una solución y tranquilizar a la persona para que aporte cuantos datos sean necesarios, como datos del autor, efectos sustraídos o dirección de huida. No puede dejarse llevar por la empatía que pueda sentir y debe pensar con claridad y rapidez.

En los grupos de Policía Judicial, los policías y guardias civiles, pueden tomar una declaración de una violación a una joven y la mejor forma de ayudarla, es dejar sus sentimientos a un lado e intentar detallar todo y buscar cualquier dato que sirva para enfocar la investigación.

No siempre es fácil. Realizar un análisis de un disco duro de un pederasta o pedófilo puede ser brutalmente impactante. Para ello hay que tener mucho estómago y visualizar el fin de ver esas fotografías y vídeos, como, por ejemplo, identificar posibles víctimas. No todos valen para ciertos puestos y deben cambiar por su salud mental.

Otro ejemplo sería Extranjería, donde se realizan redadas en clubs de alterne, donde en algunos de ellos explotan sexualmente a chicas, pudiendo ser algunas de ellas menores de edad.

Policía Científica, no solo debe ver escenas totalmente dantescas, como pueden ser asesinatos, sino que deben analizar con detalle las escenas donde se han cometido dichos delitos en busca de pruebas, realizar reportajes fotográficos, así como sacar huellas o ADN.

Por todo esto, cada vez que piense que un policía no empatiza, que no se pone en su lugar o que ha estado distante, piense que debajo del uniforme hay una persona, y que a lo mejor está protegiéndose para que no le afecte emocionalmente tanto, como para desvelarle varias noches.