Entrevista de Digital h50 a Mónica Gracia, Secretaria General del Sindicato Unificado de Policía –SUP, sobre la reforma de la Ley Orgánica de Protección y Seguridad Ciudadana y las reuniones/manifestaciones convocadas a finales de noviembre en protesta.
¿Por qué una concentración ahora?
En primer lugar, me gustaría dejar bien claro que este es un problema que crean el Gobierno y sus socios. Se trata de una reforma legal que no demanda la sociedad, y que por tanto responde a criterios políticos más que prácticos.
No nos gusta ni el fondo, ni las formas. El proyecto de reforma se ha hecho sin contar con los policías, y se anuncia públicamente cuando apenas queda margen para reaccionar.
En esta situación, una concentración y manifestación de todas las asociaciones y sindicatos de policías y guardias civiles, es la única solución rápida que nos dejan para manifestar nuestra oposición de forma visible a los ciudadanos que al final van a ser los mayores perjudicados.
¿Qué pretendemos con la concentración como sindicato?
Lo primero mostrar a los promotores de la reforma que todos los sindicatos estamos unidos en contra de este despropósito.
En el SUP trabajamos por y para los policías, y por tanto creemos que es el momento de dejar de lado los afanes de protagonismo y los intereses particulares para luchar todos juntos por los policías.
Por este motivo desde el SUP hacemos un llamamiento a la unidad y a mantener ese frente común para defender a la Policía con mayúsculas.
La concentración sirve para cohesionar este frente común, sacar el problema a la luz, frenar la ejecución de la reforma de la Ley, y de paso es una invitación al Gobierno para sentarse a dialogar con los policías que, en definitiva, somos los principales actores de la Seguridad Ciudadana.
¿Qué opinión os merece la reforma?
Absolutamente negativa. Es una reforma dañina para los policías y para los ciudadanos. Es una reforma que complica la convivencia. La reforma va a dinamitar el principio de autoridad dejando a los policías desamparados justo cuando más se necesita, y eso desde el SUP no podemos permitirlo.
Además, llega en el peor momento, justo cuando vivimos una situación de excepcionalidad sanitaria y un contexto complicado en lo político y en lo social.
Tampoco nos gusta la forma en que la Ley parece dejar en entredicho el trabajo y la integridad de nuestros compañeros, y ya entrando al detalle, te diré que muchas de las nuevas exigencias que estable la reforma son literalmente imposibles de cumplir por falta de recursos humanos y materiales. Como siempre, se pretende que los policías se dejen la piel para cumplir con exigencias imposibles, sólo que en esta ocasión esas exigencias encima les perjudican y ponen en peligro.
Insistes en que la reforma perjudica y pone en peligro a los policías. ¿Qué aspectos concretos del proyecto de reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana os preocupan más?
Desde el SUP rechazamos frontalmente con muchos artículos de esa reforma, pero centrándonos en algunos. Nos parece preocupante, e indignante que con la reforma legal se pretenda despojar de la poca protección que les queda a los policías que trabajan en las zonas más complicadas hoy por hoy de nuestro país, El Campo de Gibraltar, por ejemplo, o Cataluña.
La nueva reforma dejaría tomar imágenes de ellos trabajando a discreción, entorpeciendo su trabajo, creándoles inseguridad jurídica en su labor, y facilitando el trabajo a los delincuentes o los violentos y quienes les apoyan, para acosar y amenazar la vida de los policías y sus familias.
Retirar la presunción de veracidad a los atestados y actas policiales, rebajando “la palabra” del policía al mismo nivel que la del delincuente, favorecerá la reincidencia, obligará a invertir más recursos policiales en resolver menos incidentes, y los ciudadanos serán los principales perjudicados.
Otro despropósito es permitir las manifestaciones espontáneas sin comunicar ni advertir de su recorrido, eso impedirá que la Policía pueda garantizar la seguridad de los manifestantes, recortará la libertad de los que no se manifiestan y pondrá en riesgo a los policías al no existir un planeamiento previo para garantizar la seguridad de todos.
También habéis creado una plataforma con todas las asociaciones. ¿Cuál es su objetivo?
Sí, hemos creado junto a la mayoría de sindicatos y asociaciones policiales la plataforma “No a la #España Insegura” y desde el SUP insistimos en invitar a todos a sumarse a ella por el bien de los policías, de los guardias y de los ciudadanos. La plataforma principalmente tiene un objetivo social e inclusivo. Se trata de que la plataforma cuente con la participación del mayor número de actores sociales, de sindicatos, de asociaciones, de agrupaciones ciudadanas y vecinales…Es necesario abrir la plataforma a todos, porque a todos nos vas a afectar significativamente este proyecto de reforma legal que influirá decisivamente en la seguridad de todos. Por eso, la plataforma no sólo es una herramienta de coordinación, sobre todo es un foro de participación donde se recogerán todas las inquietudes de todos los actores sociales para incluirlas en nuestras reivindicaciones y, en un futuro, en un posible proceso de diálogo con el Gobierno para que retire de ese proyecto de reforma todas las iniciativas lesivas para los policías y los ciudadanos.
Si el Gobierno quiere darle un barniz legal a una Ley injusta con los policías, va a tener enfrente al SUP, siempre.
