Ingenuos, malvados, inteligentes y estúpidos: los rendimientos del mal
Para hacer el mal, antes el hombre debe concebir el bien. Es requisito forzoso. Podemos observar la maldad desde varias perspectivas, incluida la sociocriminal que es la manera más transgresora y la que mayor inquietud causa en las personas. Lo vemos a diario en las comisarías, en los juzgados o en las prisiones. Pero no…